Publicidad
Publicidad

Un microARN predice la respuesta al tratamiento en la leucemia linfocítica aguda

El grado de metilación de su región promotora podría identificar a los pacientes que se beneficiarán de la terapia de combinación con decitabina y venetoclax.

03/05/2024

Un estudio epigenómico realizado en ratones y en células de pacientes establece el potencial clínico del microARN miR-182 en la leucemia linfocítica aguda (LLA). En el examen de múltiples muestras de LLA los investigadores han determinado que una proporción de pacientes presenta hipermetilación en la región promotora de miR-182, lo ...

Un estudio epigenómico realizado en ratones y en células de pacientes establece el potencial clínico del microARN miR-182 en la leucemia linfocítica aguda (LLA). En el examen de múltiples muestras de LLA los investigadores han determinado que una proporción de pacientes presenta hipermetilación en la región promotora de miR-182, lo que se asocia a una baja transcripción de este último. Como consecuencia, los niveles de la proteína antiapoptótica BCL2 aumentan, rasgo que incrementa la sensibilidad de las células cancerosas a venetoclax.

La viabilidad de estas células se vio reducida por la combinación de decitabina y venetoclax, fármacos que exhibieron un efecto sinérgico in vitro. Shenmeng Gao, científico de la Universidad Médica de Wenzhou y codirector del estudio, afirma que esta combinación farmacológica no tuvo ningún efecto significativo en células de LLA con hipometilación en la región genómica examinada. El valor de este microARN ha podido ser sustanciado en ratones genéticamente deficientes en miR-182, los cuales desarrollaron LLA de células B o T mucho más rápidamente. Inversamente, la sobreexpresión de miR-182 redujo la expresión de BCL2 y de otra proteína antiapoptótica, con la consiguiente inhibición de la proliferación celular. Gao prosigue indicando que, a pesar de la buena prognosis general de la LLA, siguen existiendo poblaciones de pacientes de alto riesgo o que experimentan relapso, lo que representa un desafío terapéutico. Adicionalmente, la quimioterapia, el trasplante de médula ósea o la terapia celular CAR-T, presentan limitaciones, tales como resistencia y efectos adversos, lo que impone la necesidad de desarrollar tratamientos nuevos, concluye el investigador.

Publicidad
Publicidad
Nuestros Podcasts