El planeta está siendo expuesto a una tendencia preocupante de aumento de las temperaturas, fenómenos meteorológicos extremos, escasez de agua y de alimentos y deterioro de la calidad del aire. La frecuencia e intensidad de estos fenómenos están superando la capacidad de los sistemas naturales y humanos para responder eficazmente, lo que tiene consecuencias de gran alcance para la salud.

Las olas de calor, exacerbadas por el cambio climático, se han relacionado con efectos adversos para la salud, incluidos ataques cardíacos, enfermedades renales y trastornos de salud mental. Asimismo, los cambios en los patrones climáticos amenazan la seguridad alimentaria, mientras que la contaminación del aire provoca más de 7 millones de muertes prematuras al año, principalmente por enfermedades cardiorrespiratorias. Además, la escasez de agua y la contaminación inducidas por el clima alimentan la competencia por los recursos, la migración forzada y los conflictos.

Por otra parte, las repercusiones del cambio climático se extienden más allá de la salud física y afectan el bienestar mental a través de traumas, pérdida de medios de vida y ansiedad sobre el futuro. Además, los sistemas de salud, que ya están bajo presión después de una pandemia, una crisis energética y una crisis del costo de vida, enfrentan cargas adicionales debido a eventos climáticos extremos e interrupciones en la cadena de suministro.

Colaboración de los sanitarios

Bajo este escenario, "Los trabajadores sanitarios y asistenciales desempeñan un papel clave a la hora de abordar el cambio climático como una crisis sanitaria. Su posición única les permite crear conciencia, abogar por cambios de políticas y empoderar a las comunidades para mitigar y adaptarse al cambio climático", según la directora del Departamento de Medio Ambiente, Cambio Climático y Salud de la Organización Mundial de la Salud (OMS) Dra. María Neira,  "Al participar en el diálogo y la acción, los trabajadores de la salud y el cuidado pueden catalizar los esfuerzos para salvaguardar la salud humana y garantizar un futuro resiliente y sostenible para todos", agregó.

Nuevas herramientas

Para respaldar dichas actuaciones del personal sanitario, la OMS, en colaboración con sus socios, ha lanzado un nuevo conjunto de herramientas diseñado para dotar a los trabajadores sanitarios y el cuidado del conocimiento y la confianza para comunicar de manera efectiva sobre el cambio climático y la salud.

Dichos instrumentos han sido desarrollados por la OMS en colaboración de otras entidades como Health Canada, la Alianza Mundial para el Clima y la Salud, el Centro de Comunicación sobre el Cambio Climático de la Universidad George Mason, el Consorcio de la Sociedad Médica sobre Clima y Salud, la Alianza para el Clima y la Salud de Australia y la Asociación Médica Canadiense.

El principal objetivo de las mismsas es completar los vacíos de conocimiento y acción entre los profesionales sanitarios y el cuidado, todos aquellos que participan en acciones con el objetivo principal de mejorar la salud, así como aquellas ocupaciones en roles académicos, administrativos y científicos. Desde el punto de vista de la OMS, es posible que, a pesar de su reconocida confiabilidad y eficacia como comunicadores de salud, muchos trabajadores sanitarios no estén completamente equipados para abordar el cambio climático y sus implicaciones para la salud.