El evento, patrocinado por Schwabe, sirvió para ofrecer a los médicos de familia un conjunto de herramientas tanto para los pacientes como para los propios profesionales. Para ello se contó con la participación de la coordinadora del Grupo de Trabajo de Salud Mental de SEMERGEN, Dra. Verónica Olmo, y del Dr. Mario Alonso, especialista en cirugía general y del aparato digestivo, además de conferenciante y escritor, volcado en explorar el impacto de trastornos psíquicos en el conjunto de la persona.

Como se recordó durante la sesión, la ansiedad es esa respuesta anticipatoria a una amenaza futura que surge de la percepción de estímulos generales, potencialmente dañinos, evocando un estado de inquietud, agitación, preocupación e hipervigilancia. Trae consigo, además, una serie de cambios a nivel fisiológicos psicológico y a nivel laboral y social. Además, su prevalencia va en aumento, situándose en torno a un 6,7%, y afectando en mujeres el doble que en hombres.

"Muchas veces se complica el diagnóstico al aparecer en forma de somatizaciones, y es que entre el 60 y 80% de las consultas que tenemos en atención primaria son somatizaciones, es decir, aparecen con síntomas físicos que después de unas cuantas consultas acabamos dándonos cuenta de que lo que hay de base es un trastorno de ansiedad que además no está tratada", según indicó la Dra. Olmo. Y es que "en muchas ocasiones los síntomas son muy inespecíficos y se pueden enmascarar somáticamente", agregó.

Como recordó esta especialista, "el paciente con ansiedad es un paciente complejo, es una persona que sufre mucho porque la ansiedad que padece se extiende a todas las áreas de su vida. Por tanto, con escucha activa y empatía hacia el afectado ya estamos haciendo parte de nuestra terapia".

En otro momento de su intervención, la Dra. Olmo distinguió entre los síntomas físicos asociados a estos cuadros de ansiedad, que pueden ser desde vegetativos hasta digestivos, pasando por neuromusculares, cardiovasculares, respiratorios y genitourinarios. En cuanto a los psicológicos, predominan la preocupación, el agobio, el miedo, la dificultad de concentración, obsesión y bloqueo psicomotor, entre otros.

Abordaje terapéutico

En este contexto, propuso un abordaje terapéutico, en tres pasos: en el primero se procedería a la identificación, evaluación y tratamiento del trastorno, con un seguimiento activo; en el segundo, partiendo de la escasa mejoría, se plantearía una intervención psicológica de baja intensidad, incluyendo la autoayuda no guiada y la guiada por grupos piscoeducativos. El tercer paso se daría ante una respuesta inadecuada por parte del paciente a las medidas anteriormente descritas. "En estos casos, se procedería a una intervención psicológica de alta intensidad que incluyera terapia cognitiva conductual y posible tratamiento farmacológico", según expuso.

En el caso de pacientes con ansiedad leve en los que estas medidas no hayan conseguido la eficacia deseada habría que añadir un tratamiento farmacológico para el control de la sintomatología siendo Lasea el único tratamiento propuesto por su perfil de eficacia y seguridad.

Más específicamente, para los casos de ansiedad moderada, recomendó la psicoterapia cognitivo conductual, como primera elección, y ante una respuesta inadecuada o intensidad de los síntomas, habría que recurrir a la medicación. En estos casos uno de los tratamientos de elección es Lasea® en combinación con un ISRS, al ofrecer una alternativa eficaz y bien tolerada y con un perfil de seguridad superior comparado con paroxetina. En el caso de las benzodiacepinas, la recomendación de la Dra. Olmo es que "deben usarse el menor tiempo posible, entre 2-12 semanas, y, si es posible, a dosis bajas con una retirada gradual".

Respecto a los criterios de derivación a atención especializada, como especificó esta médica de familia van desde la dificultad o duda diagnóstica hasta el riesgo de autolesión o suicidio, pasando por comorbilidad significativa o respuesta inadecuada al tratamiento, entre otros.

En la última parte de su intervención, ofreció una serie de recomendaciones a los médicos de familia sobre ciertas actuaciones que, desde su punto de vista, "no serían aconsejables de realizar en estos tipos de consultas". Entre ellas destacó: "No pautar el tratamiento psicoterapéutico ante cualquier tipo de ansiedad; incluir el tratamiento farmacológico en el primer escalón del abordaje terapéutico; tener en cuenta los efectos secundarios derivados del uso crónico de benzodiacepinas, así como no informar de la duración limitada del uso de estos fármacos ni de los efectos adversos; utilizar como primera línea de tratamiento un neuroléptico; y no derivar al paciente al especialista cuando se precise".

Medicina integral

A continuación, lo que vino a presentar a los médicos de familia, de modo muy didáctico, el Dr. Mario Alonso Puig fue "un camino que pueda ser interesante y atractivo, que ayude, verdaderamente, a dar la vuelta al cauce en el abordaje de la ansiedad". De ahí el título de su conferencia "Superpoderes para abordar la ansiedad".

Tras recalcar que "la parte física y mental no se pueden contemplar como dos realidades independientes, es decir, se pueden distinguir pero no separar, puesto que la ansiedad repercute en la fisiología de la persona y causa un deterioro".

Asimismo, entre otros aspectos, se refirió a los avances que se han dado en el conocimiento de la microbiota, hasta averiguar su capacidad para alterar el funcionamiento cerebral. Asociado a ello, como recordó "la ansiedad y la depresión favorecen el intestino poroso y la inflamación crónica de bajo grado".

Otra de las recomendaciones ofrecidas por el Dr. Alonso Puig pasa por manejar el trastorno de ansiedad con el que puede presentarse el paciente en la consulta "no como un problema añadido, sino como una oportunidad velada". Además, dicha ansiedad "se puede ver reducida, en muchos casos, si el propio médico en lugar de proyectar la suya propia, se inclina por irradiar serenidad y paz", desde su punto de vista. "A ello contribuye el dedicar unos minutos diarios a la quietud y a la desconexión como parte del autocuidado. Hay que hacer un esfuerzo para obtenerlos", subrayó.

En su intervención, defendió, además, la práctica de una medicina integral en estos casos, para abarcar "dimensiones puramente físicas y materiales del cuerpo pero también otras que no son materiales".

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_{^{Sobre Lasea: medicamento sin receta que trata los síntomas transitorios de la ansiedad en pacientes mayores de 18 años, su principio activo es Silexan. 1 cápsula al día. PVPr Lasea 80 mg 56 caps: 29.60€. PVPr Lasea 80 mg 28 caps: 19.41€ · Ficha técnica de Lasea}}