El 13 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Trombosis, una fecha que busca destacar la importancia del conocimiento de esta afección causante del infarto agudo de miocardio, el ictus isquémico y el tromboembolismo venoso (TEV). En el desarrollo de su actividad, la Sociedad Española de Trombosis y Hemostasia (SETH)  pone especial hincapié en la divulgación de las herramientas que favorecen su prevención y evitan los factores de riesgo más importantes.

Desde la SETH consideran que es esencial explicar a la sociedad la naturaleza de la trombosis y realizar acciones divulgativas en favor de la prevención con consejos prácticos sobre hábitos de alimentación y modos de vida para aminorar la obesidad y las costumbres sedentarias. "Para reducir efectivamente el riesgo de trombosis, es esencial abordar la obesidad a través de una dieta saludable y la pérdida de peso cuando sea necesario. Además, es fundamental evitar el sedentarismo y mantener un nivel de actividad física regular. Estas medidas pueden ayudar significativamente a reducir el riesgo de complicaciones trombóticas y mantener una salud cardiovascular óptima", afirma el presidente de la SETH, Dr. Joan Carles Reverter.

Factores de riesgo de TEV

Aunque en aproximadamente la mitad de los casos de trombosis venosa profunda y embolia pulmonar no se conoce la causa exacta, la práctica médica y la investigación científica han identificado factores de riesgo significativos asociados con la enfermedad tromboembólica venosa.

Estos factores de riesgo incluyen cirugía o traumatismos, períodos prolongados de reposo en cama o inmovilidad (como estar sentado durante mucho tiempo en un coche o avión), cáncer, embarazo y puerperio, reproducción asistida, menopausia, tratamientos hormonales con estrógenos (como la píldora anticonceptiva y hormonas para la transición de género), predisposición congénita a la trombosis (trombofilia) y viajes largos.

La Sociedad Española de Trombosis y Hemostasia ilumina la Fuente de Plaza de España de Sevilla

El viernes 13 de octubre, con motivo del Día Mundial de la Trombosis, el Ayuntamiento de Sevilla y la SETH iluminan de rojo la fuente de la Plaza de España, uno de los monumentos más icónicos de la capital hispalense.

"Como en años anteriores, la SETH muestra su compromiso con la sociedad más allá del ámbito médico/científico. Por eso, en su 50 aniversario, queremos pisar la calle para concienciar a toda la sociedad de la prevención de la trombosis. Está acción se ha querido llevar a cabo este año concretamente en Sevilla con motivo de la celebración del XXXIX Congreso de la Sociedad Española de Trombosis y Hemostasia (SETH) que se celebrará del 26 al 28 de octubre en Sevilla", apunta el Dr. Joan Carles Reverter.

La fuente estará iluminada desde las 21h hasta las 24h.

En años anteriores, otras ciudades como Pamplona, o Málaga se unieron a esta iniciativa creada por la SETH, iluminando la fachada de su ayuntamiento para concienciar sobre la importancia de esta patología. En el caso de Barcelona, se iluminó el vestíbulo de la Universidad de Barcelona (UB) y las dos torres de su edificio histórico.

Cifras sobre Trombosis

Desde la SETH se recuerda que cada minuto una persona es diagnosticada de trombosis en el mundo. Además, cada seis minutos otra fallece como consecuencia de esta enfermedad. A pesar de la crudeza de estos datos, la trombosis suele ser desconocida por la población.

El tromboembolismo venoso o TEV puede afectar a personas de todas las edades, razas y etnias, y puede manifestarse tanto en hombres como en mujeres. Determinados factores y situaciones pueden aumentar el riesgo de desarrollar un coágulo potencialmente mortal. El tromboembolismo venoso es una causa importante de muerte y discapacidad en todo el mundo, hasta el extremo de que constituye la tercera causa de mortalidad cardiovascular tras el infarto agudo de miocardio y el ictus. Por ello, los especialistas recalcan la relevancia de saber cuáles son los factores de riesgo que pueden desembocar en esta afección.

El peligro más elevado de padecer un TEV va vinculado a procesos de hospitalización, mencionados anteriormente u otros factores como la edad avanzada, presentar antecedentes familiares de coagulopatías, y tratamientos como la quimioterapia, terapias de reemplazo hormonal y anticonceptivos orales también pueden favorecer la aparición de este trastorno.