Encontrar un espacio de escucha. Hablar un mismo idioma. Estas son las conclusiones que sacan las participantes de los talleres psicoeducativos que ha puesto en marcha el Cancer Center Clínica Universidad de Navarra durante el mes de junio para pacientes oncológicos en tratamiento activo.

"Encuentras a otras personas en tu misma situación y te ayuda a relativizar y a tener más capacidad de ser objetiva. Al final pones cara a personas que comparten tu experiencia pero que tienen sus propias vivencias. Ha sido único", reconoce Juana Santiago, que participa en un ensayo clínico. "Nos entendemos, creo que es súper interesante y sobre todo que nos ayuda mucho. Nos ayuda a abrirnos, a decir cosas a lo mejor nos cuesta decir a los demás o encontrar los errores en cosas que crees que estás haciendo bien… y resulta que no", añade Paloma Espada.

Conversan al final de una de las sesiones enfocadas a mejorar su calidad de vida durante el tratamiento, sea quimioterapia, inmunoterapia o terapias dirigidas, unas sesiones conducidas por la Dra. María Die Trill, directora de la Unidad de Psico-Oncología del Cancer Center. En ellas, la especialista les ha aportado técnicas psicoeducativas y de apoyo psicológico, herramientas que les capaciten para gestionar dificultades, así como consejos para facilitar el proceso de adaptación emocional a la enfermedad.

"Los temas que más parecen haber despertado su interés son aquellos relacionados con la comunicación y las relaciones interpersonales con su entorno, así como los relacionados con el sentido y propósito de la vida tras el diagnóstico", señala la Dra. Die Trill, que ha contado con la colaboración de los doctores Javier Blanco, médico residente en Oncología Médica, y María Gutiérrez, de la Facultad de Educación y Psicología de la Universidad de Navarra.

Aprender a gestionar sentimientos como el temor, la tristeza o el enfado, además de controlar los síntomas físicos es fundamental para la evolución favorable de estos pacientes. "Es fundamental hablar del sufrimiento o del sentido de la enfermedad y al final solo te entiende quien ha pasado o vivido lo mismo. La familia, aunque tú seas el enfermo, también vive la enfermedad y cada uno lo hace de una forma diferente. Aquí somos personas que pasamos por lo mismo y se genera un entorno seguro donde nos contamos cómo hemos resuelto o afrontado problemas que ahora estás experimentando", apunta Cristina Mohedano.

Un entorno donde han aprendido de sí mismas, a poner voz a sus inquietudes y a saber pedir ayuda. "Debido al grado de satisfacción de los participantes, se ha extendido el taller y se organizará una continuación del mismo después del verano. Además, durante los próximos meses se realizarán grupos de apoyo dirigidos a diferentes grupos en oncología, en concreto, supervivientes de cáncer y familiares de los enfermos oncológicos", concluye la Dra. Die Trill.