Por primera vez en el mundo, se dispone de una tecnología de bioimpresión tridimensional (3D) capaz de eliminar las células cancerosas, utilizando la función de las células inmunitarias. Ello ha sido posible gracias a una investigación conjunta entre el Instituto de Maquinaria y Materiales de Corea (KIMM) y el Instituto de Investigación de Biociencia y Biotecnología de Corea (KRIBB), bajo la jurisdicción del Ministerio de Ciencia y TIC, de dicho país.

Los científicos desarrollaron una tecnología de bioimpresión 3D utilizando células asesinas (células NK) como un nuevo método de inmunoterapia para tratar el cáncer, según se publica en ´Biomaterials Research´. Se trata de células NK encapsuladas en hidrogeles formadores de micro/macroporos a través de bioimpresión 3D para inmunoterapia tumoral.

Como se sabe, la célula asesina natural (NK) es un leucocito que responde a la formación de virus y células tumorales y elimina selectivamente las células que son dañinas para el organismo. Las células NK fulminan las células dañadas que se han infectado internamente, en lugar de los virus que se han entrometido desde el exterior.

Permitir que hidrogeles impresos en 3D encapsulen las células NK ayuda a prevenir la pérdida de este tipo de células y permite que la mayoría de ellas se alojen en las células tumorales. Se forman poros en el hidrogel y las células NK que retienen la viabilidad celular se liberan después de un cierto período de tiempo. Ello permite el desempeño de las funciones inmunitarias.

Aunque las células NK generalmente se usan para inmunoterapia, el método de inyección de células NK por vía intravenosa no ha mostrado resultados efectivos en ensayos clínicos en tumores sólidos. Esto se debe a que las células NK son incapaces de retener un nivel adecuado de viabilidad y no logran atacar los tumores sólidos.

Por otro lado, mediante el uso de la tecnología recientemente desarrollada, las células NK se pueden inyectar en el hidrogel, imprimir y luego cultivar en un entorno 3D, lo que mejora la viabilidad celular y la actividad de las células NK y permite que esas células se enfrenten a los tejidos cancerosos.

"Esta tecnología puede ayudar a mejorar significativamente la funcionalidad de las células NK que se utilizan para el tratamiento del cáncer. Esperamos contribuir al tratamiento de pacientes con cáncer a través de esta tecnología recientemente desarrollada", indicó el investigador principal, Su A Park, de KIMM.