Un equipo dirigido por investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts ha dado un paso adelante en la seguridad y eficacia de la edición genética, desarrollando una versión de CRISPR/Cas9 que permite integrar hasta 36.000 pares de bases en diversas localizaciones genómicas, sin generar roturas de doble cadena en el ADN. ...
Un equipo dirigido por investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts ha dado un paso adelante en la seguridad y eficacia de la edición genética, desarrollando una versión de CRISPR/Cas9 que permite integrar hasta 36.000 pares de bases en diversas localizaciones genómicas, sin generar roturas de doble cadena en el ADN. El avance ha sido posible gracias al uso de integrasas, o enzimas utilizados por virus para insertar su ADN en las bacterias a las que infectan. Fusionadas con la maquinaria de CRISPR/Cas9, las integrasas dirigen la secuencia a localizaciones específicas del genoma, insertándola a través del propio mecanismo enzimático. Denominada PASTE, esta técnica ha demostrado su eficacia tanto en células en fase de proliferación como en hepatocitos y linfocitos T primarios quiescentes, siendo su eficacia similar o superior a la de la versión tradicional.
Jonathan Gootenberg, director del estudio, afirma que PASTE minimiza el riesgo asociado a la reparación de las roturas del ADN genómico. En efecto, el proceso de reparación celular dista de ser perfecto, siendo frecuentes las deleciones de pequeñas porciones del genoma. Ocasionalmente, puede darse la pérdida de regiones cromosómicas enteras o la reorganización del ADN, con consecuencias deletéreas. Además, la versión tradicional de CRISPR/Cas9 sólo funciona en células en fase de división, ya que son las únicas en las que la maquinaria de reparación se encuentra activa. Esto limita el espectro de tejidos donde puede ser aplicada, asegura el investigador. La capacidad de programar la integración de la secuencia de interés con PASTE ha sido potenciada por la identificación de miles de localizaciones genómicas aptas para ser utilizadas como dianas para las integrasas.