La Sociedad Española de Infusión y Acceso Vascular (SEINAV) y Becton Dickinson (BD) han presentado este viernes en Madrid la nueva norma de excelencia de los equipos de infusión y acceso vascular (EIAV) para mejorar la seguridad del paciente. Se trata de una norma estándar desarrollada por SEINAV que recoge ...
La Sociedad Española de Infusión y Acceso Vascular (SEINAV) y Becton Dickinson (BD) han presentado este viernes en Madrid la nueva norma de excelencia de los equipos de infusión y acceso vascular (EIAV) para mejorar la seguridad del paciente. Se trata de una norma estándar desarrollada por SEINAV que recoge las directrices y requisitos para desempeñar las actividades en el ámbito de gestión, asistencial, docente y de investigación del EIAV.
Esta ya ha sido validada por tres hospitales: el Hospital Vall d´Hebron de Barcelona, el Hospital del Mar de Barcelona y el Hospital Universitario de Donostia, en los que se han llevado a cabo los pilotos para perfeccionar y darle la entidad definitiva. De hecho, el acto, celebrado en el Hotel Intercontinental de la capital, ha servido para reconocer la máxima acreditación (tres estrellas de excelencia) a sus equipos. Auditores expertos en calidad asistencial de la empresa DNV han acompañado en el proceso de auditoría y evaluación de la conformidad de la norma.
Además, se ha conocido que hay cinco nuevos hospitales en proceso de conseguir esta acreditación para 2023, aunque no se han concretado qué centros serán.
Todos los ponentes han querido enfatizar que, por encima de todo, esta norma se centra en la seguridad del paciente. "Hablamos de personas, de pacientes y de Enfermería. Eso es muy importante porque le da sentido a la sanidad y a la atención sanitaria", como ha expresado Carlos Molinero, director de la Unidad de Medicación de Becton Dickinson.
Fue esta compañía, centrada en la fabricación de productos sanitarios, la que promovió la materialización de la norma porque, en palabras de Molinero, "las personas tienen que hacer el mejor trabajo posible para atender al paciente. Llevar el cuidado y atención al paciente en el acceso vascular consiste en expertise de pocas manos, y del trabajo en equipo".
Son los grupos conformados de enfermería los que permiten cumplir el estándar, tal como ha explicado Camino del Río, presidenta de SEINAV y representante del Hospital Universitario de Donostia quien, no obstante, ha reconocido que en los primeros pasos de la elaboración de esta norma había que definir qué era el equipo, respondiendo a la pregunta de qué valor se quiere para los pacientes a los que atienden desde los EIAV. "Creando equipos con la mirada del cuidado. La experiencia que el paciente obtiene pasa por las enfermeras, desde luego", ha reafirmado.
En ese equipo se decidió que hacían falta dos perfiles: el gestor y el asistencial. Completándolos estarían los comités como órganos que ayuden a tomar "ciertas decisiones en relación con los distintos tipos de catéteres, qué protocolos hacer y que le dé cohesión a esa organización", ha señalado Del Río.
En total, la norma engloba más de medio centenar de puntos de obligatorio cumplimiento, y que se dividen en tres niveles: básico, intermedio y avanzado. En función de en qué nivel se cumplan los puntos, así se determinará la excelencia que acredita el EIAV de cada hospital.
Para compartir sus experiencias, también han acudido representantes de los tres hospitales acreditados. Elisabeth Lafuente, del Hospital del Mar, ha asegurado que esta norma les ha permitido "establecer los niveles competenciales", y hacer una previsión para saber qué niveles competenciales quieren alcanzar estos equipos. "La guía es una hoja de ruta de un equipo, crearlo, implementarlo y hacerlo crecer", ha celebrado. Por su parte, Raquel Corredor, del Hospital Vall d´Hebron, ha subrayado la misión de la norma, que no es otra que "mejorar calidad y seguridad asistencial respecto al abordaje global de los accesos venosos, con prácticas basadas en la evidencia científica".
Todas las formaciones para desarrollar las competencias de los equipos de enfermería dedicados a esta especialización estarán disponibles en la web de SEINAV, además de ser ponderadas, siempre bajo la petición de la organización que quiera que se le evalúe.
De tal manera que así se completa un "giro drástico" a lo que hasta ahora eran los equipos de transfusión intravenosa (ETI), comenzado en 2019 con SEINAV, ha expuesto Marian Cubero, del Hospital Clínico San Carlos de Madrid. De hecho, desde la sociedad científica se marcaron dos objetivos que, en la actualidad, ya se han completado: la realización y publicación de una guía en febrero de 2020, y la actual norma.
Así se culmina un camino que se ha recorrido durante años. Como ha reconocido Del Río, la norma es "el final del principio. Empezamos con una guía y terminamos con una norma, que pretende mejorar las condiciones de los equipos ETI en España".
Garantizar la seguridad del paciente
La mayoría de las actividades clínicas tienen un riesgo inherente y una gran cantidad de efectos adversos están relacionados con la presencia de una infección desarrollada en el hospital. La inserción de dispositivos de acceso venoso para administrar medicamentos, productos sanguíneos, nutrientes o fluidos está relacionada con la complicación conocida como Bacteriemia Relacionada con Catéter (BRC).
En este sentido, y con el firme compromiso de garantizar la seguridad del paciente, BD y SEINAV han apostado por crear sistemas de gestión encaminados a controlar este tipo de riesgos y por establecer un EIAV en los hospitales, una estrategia conjunta para conseguir la excelencia hospitalaria.
Los EIAV son equipos de enfermeros expertos en competencias de inserción y mantenimiento de catéteres intravasculares periféricos y centrales. Contar con procedimientos estandarizados entre los profesionales sanitarios especializados en catéteres contribuye a asegurar una buena actividad por parte de los expertos y promover la seguridad del paciente. Según el Estudio Nacional de Efectos Adversos (ENEAS), la incidencia de pacientes con efectos adversos relacionados con la asistencia hospitalaria es del 8,4%, de los cuales el 25,34% de las infecciones habían sido desarrolladas en el hospital. Crear estos equipos de infusión y acceso venoso permite controlar estos tipos de riesgos y alcanzar una asistencia sanitaria más segura para el paciente.
Nueva norma de Equipos de Infusión y Acceso Vascular (EIAV)
En este contexto, BD ha promovido este estándar que favorece la implantación de las mejores prácticas en acceso vascular y terapia intravenosa y en el que se recogen las directrices y requisitos para desempeñar las actividades en el ámbito asistencial, docente y de investigación por parte de los EIAV.
En concreto, la norma establece que los EIAV deben estar liderados por una enfermera gestora. Asimismo, también determina que las enfermeras que conformen el equipo pueden tener diferentes niveles asistenciales (básico y avanzado). Además, los equipos pueden contar con un perfil Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería.
Poniendo especial atención en evitar efectos adversos, la norma contempla un apartado en el que se marcan las condiciones que deben cumplir los diferentes espacios de trabajo, con el objetivo de que los equipos puedan realizar la actividad asistencial de manera fiable, eficaz y segura. En general, estas directrices maximizan la seguridad del paciente, estandarizando todos los materiales que deben estar disponibles por si se requiere de su uso, así como asegurando la limpieza del espacio de trabajo.
Se trata de una normativa viva y que busca la continua mejora y evaluación, adaptándose a las innovaciones médicas. Los EIAV deben realizar una evaluación del desempeño mediante el seguimiento, medición, análisis y evaluación de su actividad, mediante un sistema de gestión de la calidad y de la satisfacción del paciente. Todo este seguimiento se completa con una auditoría interna de los propios equipos para detectar oportunidades de mejora e implementar aquellas acciones necesarias para cumplir con los requisitos establecidos.