El nuevo enfoque podría funcionar en pacientes que conservan parte de la función de las células beta-pancreáticas.
Un estudio in vivo publicado en la revista eLife sugiere que el bloqueo del glucagón puede ser un tratamiento alternativo o complementario en el control de la glucemia en la diabetes. En ratones transgénicos se demostró que la neutralización de la acción del glucagón es beneficiosa cuando persiste una actividad ...
Un estudio in vivo publicado en la revista eLife sugiere que el bloqueo del glucagón puede ser un tratamiento alternativo o complementario en el control de la glucemia en la diabetes. En ratones transgénicos se demostró que la neutralización de la acción del glucagón es beneficiosa cuando persiste una actividad residual de la insulina, una circunstancia que se da en aproximadamente las tres cuartas partes de los diabéticos de tipo 1. La administración de un anticuerpo que bloquea el receptor del glucagón (GCGR) redujo o normalizó la glucemia en condiciones de deficiencia moderada de insulina. Los datos de expresión hepática de enzimas clave relacionados con la gluconeogénesis y la glucólisis indican que la ausencia de señalización a través del GCGR contrarresta los efectos producidos por niveles bajos de insulina, lo que podría evitar el aumento en la liberación de glucosa hepática.
Pedro Herrera, investigador en la Universidad de Ginebra y director del trabajo, afirma que de este enfoque presenta la ventaja adicional de facilitar la diferenciación de las células alfa pancreáticas en beta.
El estudio deriva de la observación previa de que los ratones deficientes en el GCGR no desarrollan diabetes tras ser expuestos a un agente químico que destruye las células beta pancreáticas.