La prevalencia mundial de las tasas de sobrepeso y obesidad en niños y adolescentes se ha duplicado en tan solo 20 años. Es un problema importante al que debe darle solución. A una dieta equilibrada y el ejercicio físico, ahora se añade el primer tratamiento farmacológico bajo supervisión y prescripción médica, al haberse aprobado en España la ampliación de la indicación de liraglutida 3.0 mg, de Novo Nordisk, para el grupo de edad entre los 12 y los 17 años.

En la presentación de esta novedad, Marta Ramón, jefa del Servicio de Endocrinología Pediátrica del Hospital Sant Joan de Déu (Barcelona), ha destacado la prevalencia mundial de las tasas de sobrepeso y obesidad en esta franja de edad, siendo España uno de los países con peores cifras de la UE "un 30% de los adolescentes españoles presenta sobrepeso u obesidad".

También ha reconocido los muchos esfuerzos por acabar con este problema durante estos años, por lo que se ha reducido la prevalencia un 3% desde 2011 al 2019. La experta cree que esto no es suficiente porque en muchos lugares las cifras de la obesidad en niños van en aumento, también ha recordado que no afecta a todos por igual porque hay un importante componente genético.

"Esta enfermedad tiene un importante impacto en la salud, pero también en los ámbitos social y económico de niños y adolescentes", ha comentado Marta Ramón. Entre otros, ha remarcado algunas consecuencias, como niños que no descansan bien durante la noche, tienen poca capacidad de concentración, mal humor, problemas de movilidad, depresión, acoso escolar, falta de movilidad en la práctica deportiva, etc.

"Un 70% de los niños y adolescentes con sobrepeso y obesidad son propensos a seguir siéndolo cuando sean adultos". Y esto, según la experta, conlleva muchas complicaciones de mayor, peor calidad de vida, diabetes etc. impacto social y de recursos sanitarios o de absentismo laboral.

Y si no se trata y no se consigue normalizar el peso y las comorbilidades asociadas a la obesidad, en la vida adulta conlleva una disminución de la esperanza y calidad de vida.

Jesús Argente, catedrático de pediatría de la Universidad Autónoma de Madrid y jefe del Servicio de Pediatría y Endocrinología Pediátrica del Hospital Infantil Universitario Niño Jesús (Madrid), ha explicado que estos adolescentes también tienen más probabilidades de desarrollar enfermedades relacionadas con el peso a una edad más temprana, como diabetes, alteraciones del metabolismo del ácido úrico y enfermedades cardiovasculares.

Mientras que ha recordado la actual pandemia por la Covid-19 ha agravado este problema. "pues 1/3 de nuestros hijos pueden padecer sobrepeso u obesidad". El hecho de que la Agencia Europea del Medicamento autorice por primera vez un tratamiento para la obesidad en esta franja de edad contribuye a visibilizar la obesidad como la enfermedad que es, según el experto.

"Este medicamento es un elemento más en la ayuda para frenar estas enfermedades y lo que esperamos es que se pueda instaurar una medicina cada vez más personalizada porque veremos los cambios de forma individualizada y de qué forma responden los pacientes al tratamiento", ha matizado.

Evidencias clínicas de liraglutida 3.0 mg en adolescentes

Liraglutida 3.0 mg ha demostrado mejoras en el índice de masa corporal y en el peso de adolescentes con obesidad. Y lo ha hecho en un ensayo clínico fase 3, aleatorizado, doble ciego, que ha investigado el efecto de liraglutida 3mg. comparado con placebo para el control de peso en 251 adolescentes con obesidad y como complemento a un estilo de vida saludable.

En el ensayo, después de 56 semanas de tratamiento, hubo una diferencia en el índice de masa corporal (kg/m2) en el brazo de liraglutida 3.0 mg en el que los adolescentes lograron una reducción del 4,29% en el IMC, frente al incremento del 0,35% con placebo.

Francisco Pajuelo, director médico de Novo Nordisk, ha explicado que se trata de un camino de la innovación terapéutica y con ella unas esperanzadoras expectativas para conseguir mejorar el control de la obesidad y de la calidad de vida también de los adolescentes que la padecen.

Liraglutida 3.0 mg es un análogo de péptido 1 similar al glucagón (GLP-1) con un 97% de similitud con el GLP-1 humano natural,5,6 una hormona que se libera en respuesta a la ingesta de alimentos. Como el GLP-1 humano natural, liraglutida 3mg. regula el apetito al aumentar la sensación de plenitud y saciedad, al tiempo que reduce la sensación de hambre, lo que conduce a una menor ingesta de alimentos.