El Foro de Médicos de Atención Primaria (AP) ha organizado el evento con motivo del Día Mundial de la Atención Primaria más difícil: el del año de la pandemia de la COVID-19. Para los profesionales de este colectivo en especial, al enfrentarse en primera línea a los efectos del SARS-CoV-2.

Un día para reivindicar el papel de AP en el sistema de salud. Para denunciar, como ha hecho Tomás Cobo Castro, presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos, OMC, que la administración "no se haya dado cuenta de la importancia de la atención primaria". Más recursos, más importancia de sus profesionales y más dedicación para quienes enfrentan de primera mano las consecuencias de la pandemia. Para María Fernández García, vicepresidenta primera de la semFYC, un día necesario para que se hagan "realidad".

Un evento que ha contado con la participación de la ministra de Sanidad, Carolina Darias. Durante su mensaje a los profesionales, ha anunciado que el ministerio dará a conocer "próximamente" nuevas reformas e inversiones en Primaria. "Será una de las más importantes que afrontaremos en los próximos años", ha señalado.

Darias ha incidido en la importancia de fortalecer las capacidades "asistencial, preventiva, de equidad y cohesión social, la inteligencia sanitaria y adaptación y resiliencia del conjunto del Sistema Nacional de Salud".

Una "columna vertebral" que aproxima a las personas tanto en el contexto familiar, como en el sanitario y asistencial, ha añadido la ministra de Sanidad. En relación a la cercanía en el ejercicio de la profesión ha intervenido Ángel López Hernanz, médico de Familia Rural.

"La mejor manera de enfrentarse a una pandemia es mediante una atención primaria fuerte. Es fundamental una AP más sólida", ha afirmado. Como médico de familia "que trabaja en un entorno rural", López se siente como "uno uno de los miembros de uno de los muchos equipos que trabajan en AP". Ha recordado cómo los profesionales de este colectivo fueron "los primeros" en intervenir, aún "sin saber a qué nos enfrentábamos".

"La AP de salud debe ser considerada un pilar importante: conocemos las personas, las familias, somos accesibles y damos atención integral. La atención hospitalaria y la UCI es importante, pero la mayoría no llegan al hospital".

La COVID aceleró nuevos enfoques a la hora de atender a los pacientes: telemáticas en su mayoría, sin renunciar a la presencialidad o visitas a domicilios para pacientes en paliativos. Y aun así, critica López, "parece que hemos sido invisibles para muchos. Los de Primaria han participado poco en la toma de decisiones relativas al coronavirus. Pero todos hablan de nosotros".

Para que adquiera más peso y sea más visible, el presidente de la OMC ha querido adelantar algunas de las medidas que tomará en lo que le resta de mandato. "Formación y acreditación", ha resumido Cobo.

Una formación "en el día a día", que sea internacional y permita así la movilidad internacional de los profesionales, a través de una plataforma que impulsa la organización. También ha subrayado el papel clave de las universidades en la mejora de dicha formación: "el modelo se basa sin ninguna duda en la AP. Esto lo tenemos que reforzar desde la universidad, que se enfoca al ámbito hospitalario. Así enfocaremos a los estudiantes a lo que realmente es la vocación de médico". Precisamente, el presidente de la OMC ha calificado como "patético" el mecanismo de comunicación entre AP y Hospitalaria.

Otro de los enfoques que ha mostrado Cobo ha sido la precariedad de los profesionales en España. "Impacta en el ciudadano que cada vez que va al médico sea uno diferente".

Sobre la factura emocional que ha pasado la pandemia a los profesionales de Primaria ha hablado Montse Esquerda Aresté, presidenta de la Comisión de Deontología del Consejo de Colegios de Médicos de Cataluña y directora del Instituto Borja de Bioética (Universidad Ramón Llull).

"Estamos muy acostumbrados en cuidar a los otros y poco acostumbrados a cuidarnos a nosotros mismos", ha analizado Esquerda. Se ha remontado a antes de la pandemia, con una Primaria "cansada y exhausta". Fue lo que ha descrito como "burn-out" de los profesionales de AP.

"Crisis de cansancio de profesionales, quemados, exhaustos, desmotivados. Desajuste entre el contrato social implícito y el explícito. De ese decalaje nace parte de ese malestar al que se llega a la pandemia".

Eso llevó a que muchos profesionales se plantearan seriamente dejar sus trabajos, ha explicado. A ello se sumaban dos sobrecargas, la informativa y la cognitiva, que obligaban a una formación continua y cambiante durante un periodo largo de tiempo.

Pero Esquerda también ha querido enfatizar la importancia de plantearse hacia dónde quiere ir la Primaria. Y ha señalado dos pilares: "resiliencia y reflexión" como manera de seguir y reinventar al colectivo. "No podremos hacer una adecuada AP si no sobrevivimos a lo que ha supuesto la pandemia".

Por último, tuvo lugar un debate entre todos los ponentes donde salió a relucir la importancia de la asignación de más recursos para mejorar las condiciones en las que trabaja el colectivo.

El Foro agrupa a las principales organizaciones y sociedades médicas representativas de este ámbito asistencial: la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap); el Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM); la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM); la Organización Médico Colegial de España (OMC); la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN); la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (SemFYC); la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG); y la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP).