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Mejorar las tasas de vacunación de la gripe es prioritario para evitar sobrecargar más al sistema sanitario

La AEV, junto al Congreso de los Diputados y Ministerio de Sanidad, organizó un webinar para hablar de toda la problemática alrededor de la vacunación de la gripe y cómo la campaña se ha visto condicionada por el entorno de la Covid-19.

15/10/2020

En plena segunda ola de la pandemia de la Covid-19, el sistema sanitario se encuentra agotado y saturado, por lo que un incremento de las hospitalizaciones por culpa de la gripe podría suponer un golpe difícil de soportar. Por ese motivo, la campaña de la vacunación de la gripe ha ...

En plena segunda ola de la pandemia de la Covid-19, el sistema sanitario se encuentra agotado y saturado, por lo que un incremento de las hospitalizaciones por culpa de la gripe podría suponer un golpe difícil de soportar. Por ese motivo, la campaña de la vacunación de la gripe ha empezado este año antes para intentar incrementar las coberturas entre la población de más riesgo y los profesionales sanitarios. Los datos del hemisferio Sur invitan a ser optimistas, aunque los expertos inciden en recalcar que todavía es pronto para hacer predicciones.

Para hablar de toda la problemática alrededor de la vacunación de la gripe y de cómo este año la campaña se ha visto condicionada por el entorno de la Covid-19, la Asociación Española de Vacunología (AEV) organizó un webinar en colaboración con el Congreso de los Diputados y el Ministerio de Sanidad. Esta iniciativa hasta este año se realizaba presencialmente en el propio Congreso de los Diputados, pero precisamente la situación de pandemia de la Covid-19 motivó su digitalización.

Aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que se alcancen tasas de vacunación para la gripe del 75%, lo cierto es que en España no se está cerca de alcanzar este objetivo. En la campaña del año pasado solo se logró que un 57% de los mayores de 64 años, una de las poblaciones definidas como de riesgo, lo hicieran. Más problemática es la tasa entre los profesionales sanitarios, que apenas superó el 33%. "Estamos ante un escenario muy poco favorable en el que la gripe puede acabar de colapsar todo el sistema sanitario. Sin embargo, medidas como el uso de las mascarillas, la distancia social y el lavado de manos impuestas por la COVID-19 pueden ayudar a reducir el impacto de la gripe. No debemos olvidar no obstante que la vacuna es el instrumento más potente del que disponemos y si logramos unas tasas importantes de vacunación es posible que le asestemos un golpe muy potente a la gripe este año", explicó durante la presentación del webinar Amós García, presidente de la AEV.

Objetivo claro: mejorar las tasas de vacunación

Cada año se espera a la gripe por las consecuencias que esta tiene para el sistema sanitario, sobrecargándolo y aumentando la mortalidad en las poblaciones de mayor riesgo. Para combatirla, expertos como Antoni Trilla, jefe del Servicio de Medicina Preventiva y Epidemiología del Hospital Clínic de Barcelona, inciden en la importancia de la vacunación. "Disponemos de una buena vacuna, segura y eficaz. Pero es cierto que nos enfrentamos al reto cada año de la desconfianza que hay en ella por parte de la población. Es cierto que no es perfecta, pero es la mejor protección que podemos ofrecer".

Durante su ponencia, Trilla señaló como España está lejos de conseguir los objetivos en vacunación recomendados por la OMS, indicando como en la población de más de 64 años no solo se está por debajo sino que además existe una tendencia ligera de descenso en los últimos años. "En el grupo de embarazadas y de profesionales sanitarios estamos viendo no obstante un incremento de las tasas, todo y que están todavía más lejos de los objetivos marcados por la OMS. El caso de los profesionales sanitarios es especialmente preocupante", apuntó Trilla al mismo tiempo que comparó las tasas con las de Inglaterra, donde se consigue llegar a un 70% tanto en la población de más edad como en los profesionales sanitarios. "Un sistema con incentivos por vacunación, campañas de promoción muy originales y una larga tradición son quizás algunos de los motivos que explican estos mejores resultados en Inglaterra".

Con todo, Antoni Trilla señaló que aun sin alcanzar las tasas del 75%, los resultados de la vacunación son más que aceptables. Con una efectividad para prevenir la enfermedad del 59% el año pasado, la campaña de vacunación logró que se produjeran un 26% menos de hospitalizaciones, un 40% menos de ingresos en las UCI y reducir en un 37% la mortalidad. "No hay que olvidar que la gripe tiene importantes efectos en las poblaciones de riesgo, triplicando las hospitalizaciones de las personas con diabetes, multiplicando por 3 la posibilidad de un nuevo ictus y por 4 de un nuevo ataque cardiaco y es la primera causa de mortalidad en personas con problemas pulmonares".

Optimismo a pesar de todo

Aunque la temporada de este año se prevé compleja por la coexistencia con la pandemia de la COVID-19, los datos de la campaña en el hemisferio Sur invitan a cierto optimismo. En países como Australia, Chile, Argentina o Sudáfrica se ha podido observar como a diferencia de otros años la incidencia de la gripe ha sido prácticamente nula. "Detrás puede haber múltiples causas, pero todo apunta a que los confinamientos por la COVID-19 han motivado que haya una menor circulación del virus, lo que sumado al uso de mascarillas, distancia social y lavado de manos ha permitido estos resultados. Aunque todavía desconocemos cuál será efectividad de la vacuna de este año y cuáles serán las tasas que alcancemos de vacunación, yo creo que estaremos ante un escenario de baja incidencia de la gripe", apuntó Trilla.

El experto no obstante señaló que también es posible que una vacuna menos efectiva, con tasas bajas y una circulación de moderada a alta del virus de la gripe puede cambiar la perspectiva. "Puede ser un invierno largo, frío y complicado. Nuestro sistema sanitario está cansado por exceso de trabajo y hay preocupación por la saturación. Por eso es importante disponer también de pruebas rápidas que nos permitan diferenciar entre la gripe, la COVID-19 y otras enfermedades respiratorias para poder actuar en consecuencia".

Consenso en la necesidad de mejorar las tasas

En el webinar también se contó con la participación de los portavoces sanitarios de los grupos más importantes del Congreso de los Diputados. Todos ellos coincidieron en la importancia de la campaña de vacunación de este año y la necesidad de lograr unas mejores tasas para evitar el colapso del sistema sanitario, aunque no todos apuntaron en la misma dirección en lo referente a la manera de conseguirlo.

Ana Prieto, portavoz del PSOE en la Comisión de Sanidad apuntó la importancia de reforzar la vacunación y apuntó dos medidas tomadas desde el Gobierno. "Por una lado hemos puesto en marcha la campaña `Yo me vacuno´ con la que queremos concienciar a la ciudadanía de la importancia de la vacunación y también hemos hecho una compra extraordinaria de cinco millones de dosis para reforzar a las comunidades autónomas", comentó mientras incidió también en el hecho de avanzar el inicio de la vacunación a la primera quincena de octubre.

Por su parte, Elvira Velasco, portavoz del PP en la Comisión de Sanidad, aunque también coincidió en la importancia de mejorar las tasas de vacunación, puso en duda que esto se pudiera lograr solo con campañas informativas y abogó por la necesidad de una estrategia común para un abordaje integral de la gripe. "Hemos de trabajar de una forma coordinada y no que haya 17 modelos de vacunación diferentes en cada territorio".

Rosa María Medel, portavoz de UP en la Comisión de Sanidad, puso sobre la mesa la necesidad de que la campaña de vacunación fuera llevada a cabo la Atención Primaria y las enfermeras y no desde las farmacias. "Se está aprovechando una coincidencia para una práctica que entra en el intrusismo del lugar donde se va a administrar la vacuna. La farmacia no está preparada para actuar si hay una reacción adversa y un farmacéutico no puede prestar asistencia. Lo que hay que hacer es reforzar la Atención Primaria y no utilizar esto como una justificación para una privatización de servicios".

A la espera de la vacuna de la COVID-19

Elvira Velasco también apuntó en la línea de mejorar la confianza de la población en las vacunas. "Más que nunca necesitamos la aportación de los científicos, pero sabiendo que es difícil acortar los plazos de la investigación. No sabemos todavía como va a actuar una nueva vacuna, y esto puede motivar un miedo que baje los niveles de vacunación". Para Velasco también es importante incidir en la necesidad de una estrategia unificada y de definir de forma clara cuáles son los grupos de riesgo que necesitarán de forma prioritaria esta nueva vacunación de la COVID-19.

"La vacuna no es el único recurso para vencer el virus, pero sí el más importante", apuntó Ana Prieto. Para la portavoz socialista es importante garantizar el acceso a las vacunas y por eso consideró de gran valor que España esté dentro de la estrategia de vacunación europea, señalando como la Unión Europea ha firmado dos contratos con Astrazeneca y Sanofi para la compra de 300 millones de unidades de cada una de las vacunas que están desarrollando estas farmacéuticas. "Pero hemos de tener claro que estas vacunas necesitarán antes ser aprobadas por la Agencia Europea del Medicamento y solo podrán ser usadas cuando esté claro que sean seguras y eficaces".

Aunque las posibles nuevas vacunas para la COVID-19 se presentan como la solución, Rosa María Medel quiso apuntar que todavía es pronto para saber cual será la inmunidad que se va a lograr con ellas, enfrentándonos con un horizonte dudoso. Apuntó también a la necesidad de saber cuál es el precio real que tendrá la fabricación de estas vacunas. "Estamos de acuerdo en que es necesario que haya aportación de fondos públicos. Pero de igual manera, entendiendo que la industria farmacéutica busca tener un beneficio, tenemos que saber cuáles son los costes de fabricarla".

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