La Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen) organizó este jueves por streaming, en su plataforma online Semergen en Vivo, un Especial Coronavirus para arrojar luz sobre todo lo que se necesita saber sobre el Covid-19 en Atención Primaria.

En la sesión formativa; participaron como ponentes los doctores Manuel Linares Rufo, coordinador del Grupo de Trabajo de Enfermedades Infecciosas, Medicina tropical y del viajero de Semergen; Fernando de la Calle, médico de la Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital La Paz-Carlos III, y Paolo Ciardo, miembro del Grupo de Trabajo de Urgencias de Semergen. Fueron moderados por Milagros González Béjar, vocal de Relaciones Institucionales de la Junta Directiva Nacional de Semergen, quien comentó que, según los últimos datos, había 3.004 personas afectadas y 84 fallecidos.

En un primer bloque, se habló de lo que es el Covid-19. Linares Rubo señaló que, en los tres meses desde que se inició en China, ha habido una evolución de lo que ya es una pandemia y llamó a la responsabilidad. A su juicio, las medidas de contención es lo que puede hacer que la curva de contagio se reduzca. Este tipo de virus es un salto de especie a otros coronavirus que se han dado en el pasado. La sintomatología es "respiratoria". El período de incubación es de unos cinco días aproximadamente. Son virus en los que se puede estar asintomático y empezar la sintomatología a los varios días. "Es un virus que, en la gran mayoría de los ingresados, eran pacientes con comorbilidades", informó. Las medidas de contención van dirigidas a que la infección no llegue a las personas de riesgo. "Sin han cerrado los colegios, las universidades, las reuniones, no puede favorecerse que los niños o los trabajadores vayan a un parque o a un bar y haya una reunión", declaró. Advirtió de que hay que tener cuidado con los abuelos que cuidan de los niños. En ese sentido, cada persona cuenta. Hay que aplanar la curva de afectados para que la capacidad del sistema sanitario no se vea saturada por el coronavirus.

Sobre protocolos de actuación, Ciardo explicó que se van modificando según va evolucionando la pandemia. El mensaje a la población es de utilizar las Urgencias cuando lógicamente se necesite, para que no se retrase el diagnóstico de la gente que lo necesite. La medida básica de protección es el lavado de manos. Es lo básico. La mascarilla quirúrgica sirve para que el posible paciente que está contagiado haga que las gotas infectadas no lleguen a un receptor. Hay que poner carteles informativos, tanto de Atención Primaria como de Urgencias, para que los pacientes sepan lo que hay que hacer. "Hay que concienciar a la gente para que tosa en el codo", expresó. Ante una sospecha de contacto, lo primero es que al paciente se le ponga una mascarilla y se le aísle. El protocolo se activa cuando presente tos, fiebre o disnea asociado a un criterio patológico, si ha tenido contacto con un infectado o ha viajado a una zona de riesgo. Acto seguido, hay que valorar la gravedad del paciente. En estos momentos, hay que evitar sobresaturar los hospitales, por lo que se puede ir a casa en situación de autoaislamiento si un paciente está estable. El paciente ha de evitar el contacto con otros familiares. Los contactos con los acompañantes han de ser a una distancia de seguridad, con mascarilla de protección y el mínimo indispensable. "Es concienciar a la población de que tenemos que quedarnos en nuestra casa y evitar las aglomeraciones", expuso.

De la Calle añadió que la situación en los hospitales es complicada ahora. "Es labor de todos la educación sanitaria", afirmó. Linares Rufo propuso un circuito limpio y uno sucio en los centros sanitarios e identificar a los pacientes de riesgo especial para facilitar una prevención. Mostró cómo ha de ponerse la mascarilla, sellando bien la nariz, y cómo ha de quitarse con higiene para no contaminar zonas. Habría que renovar la mascarilla cuando se sospecha que se ha roto el compartimiento estanco. El gran riesgo es que la gente se toca mucho la cara. "No debería haber mañana un centro de Salud que no le dé una mascarilla a alguien que esté tosiendo", advirtió. Una de las cosas que se han visto con esta crisis es que hay que proteger al profesional sanitario. Por ello, tienen que tener medidas de autoprotección todas las personas de los centros, incluidas las de administración. Hay que hacer salud comunitaria. Esto a China le ha funcionado. Nosotros vamos detrás de Italia.

"Es fundamental el cribado, la identificación de casos, para cortar las vías de transmisión. Es necesario conocer los síntomas para identificar lo antes posible y aplicar las medidas oportunas. Lo primero es estar todos con el conocimiento de poder identificar los casos", subrayó De la Calle. Los protocolos están cambiando cada día, pero el mensaje de prevención ha de ser el mismo, según Linares Rufo. A día de hoy, en la Comunidad de Madrid, hasta ayer se tomaban muestras a pacientes con síntomas compatibles. Desde ayer, se considera la Comunidad de Madrid como un sitio de transmisión comunitaria. En el 80% de los casos, es un cuadro catarral. En estos momentos, gente que no esté sintomática, no se hace muestra, porque se considera que el virus está en la Comunidad. Recordó que también hay que habilitar que la atención a otro tipo de casos que no sean por coronavirus se pueda llevar a cabo con racionalidad.

"Es un virus en el que la inmunidad poblacional es cero. Puede contagiar a cualquiera", avisó De la Calle. Eso significa que puede haber mucha gente afectada a la vez. Por eso, ha habido que modificar la asistencia en cuidados intensivos. Ha habido que trabajar a marchas forzadas para adecuar espacios para los pacientes de cuidados intensivos. Por ende, es muy útil en situaciones de virus emergentes la comunicación real entre profesionales sanitarios. Es un virus nuevo, por lo que es bueno que el sistema sanitario se pueda amoldar a las situaciones con protocolos cambiantes. La particularidad de este virus es que también se replica en vías respiratorias altas, por eso la importancia de las mascarillas en pacientes que tengan el virus.

¿Hacia dónde avanza la enfermedad? Linares Rufo apuntó a que la tasa de contagio es de 2 a 3,11 contagios por persona afectada. La mortalidad, por edad, está prácticamente en personas mayores. Por eso, consideró que hay que cuidarlas. De la Calle anunció que no existe aún ningún tratamiento probado para no desarrollar la enfermedad. En cuanto a enfermos, se estratifica según la gravedad, los factores de riesgo y si hay una patología pulmonar seria. Si son pacientes con factores de riesgo o con patología pulmonar, se podría plantear algún antiviral que parece que podría ser útil (sin que esté demostrado) e individualizar la actuación. Todos pidieron que se consulten sólo "fuentes fiables".