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Diagnosticar el cáncer de hígado en una fase inicial, clave para mejorar la supervivencia del paciente

La FEAD difunde la campaña “Cuídatex5”, en colaboración con Laboratorios Vilardell, para favorecer la prevención y el tratamiento del cáncer en el aparato digestivo: de estómago o gástrico, de páncreas, de hígado, de colon y de esófago.

20/11/2019

El diagnóstico del cáncer de hígado, en una fase inicial, permite conseguir una supervivencia a 5 años del 70%. Por este motivo, en el Día Mundial sin Alcohol, la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD) se centra en este tumor, uno de los 5 cánceres del aparato digestivo, que tiene ...

El diagnóstico del cáncer de hígado, en una fase inicial, permite conseguir una supervivencia a 5 años del 70%. Por este motivo, en el Día Mundial sin Alcohol, la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD) se centra en este tumor, uno de los 5 cánceres del aparato digestivo, que tiene como causa importante el consumo elevado de alcohol, con el objetivo de difundir pautas preventivas e identificar el posible riesgo para que la enfermedad se detecte en fases tempranas.

Según datos proporcionados por la OMS (Organización Mundial de la Salud), el cáncer de hígado fue el cuarto tumor responsable del mayor número de fallecimientos por cáncer a nivel mundial en 2018 (8,2%). Por delante del hepatocarcinoma, se situaron el cáncer de pulmón (18,4%), el cáncer colorrectal (9,2%) y el cáncer de estómago (8,2%) y por detrás, el cáncer de esófago (3,4%). En nuestro país, según el INE (Instituto Nacional de Estadística), en 2017 fallecieron 5.192 personas a causa del hepatocarcinoma.

Con el fin de concienciar de los efectos nocivos del consumo de alcohol en el cáncer de hígado y potenciar las medidas preventivas contra el mismo, la FEAD y Laboratorios

Vilardell continúan con la campaña "Cuídatex5" con el objetivo de ampliar el conocimiento y concienciar a los ciudadanos sobre la importancia en la prevención en los 5 tipos de cáncer en el aparato digestivo: estómago, páncreas, hígado, colon y esófago, que se engloban dentro del cáncer gastrointestinal.

La Dra. Mileidis San Juan Acosta, especialista en Aparato Digestivo y responsable del Comité de Actividades Fundacionales de la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD), especifica que "se trata del sexto cáncer más común de manera global y afecta en un 75% de los casos a los varones, siendo en su mayoría diagnosticados cuando el paciente tiene más de 45 años. En la mayoría de los casos, la enfermedad se detecta en fases tardías porque los síntomas son inespecíficos y los pacientes incluso pueden permanecer asintomáticos en el momento del diagnóstico. Los síntomas más comunes son el cansancio, pérdida de peso o dolor abdominal".

Causas

Tener una cirrosis hepática previa es la causa principal de sufrir hepatocarcinoma y en Europa la causa de cirrosis más frecuente hasta la actualidad es el virus de la hepatitis C. Además, otras de las causas importantes son:

• Las hepatitis virales (hepatitis B y C)

• El abuso de alcohol

• El síndrome metabólico (hígado graso no alcohólico - ENHA o NASH)

Y también existen otras causas mucho menos frecuentes como: hepatitis autoinmune, enfermedad de Wilson, enfermedades colestáticas hepáticas, déficit de alfa 1 antitripsina o hemocromatosis.

"Desde la Fundación Española del Aparato Digestivo queremos concienciar de las pautas preventivas ante el cáncer de hígado que se diagnostica anualmente a 6.499 personas en España y a 850.000 en todo el mundo. Además, su incidencia actualmente se encuentra en aumento, fundamentalmente debido a un incremento del hígado graso no alcohólico (NASH o ENHA)", explica la Dra. Susana Llerena Santiago, especialista en Aparato Digestivo y experta de la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD).

Pautas preventivas y diagnóstico

La pauta preventiva más importante consiste en evitar la enfermedad hepática subyacente a través de medidas efectivas como:

- Vacunarse de la hepatitis B. La vacunación universal ha tenido un impacto sobre la reducción de la aparición de carcinoma hepatocelular. A pesar de ello, actualmente existen unos 400 millones de adultos a nivel mundial infectados.

- Detectar y tratar la hepatitis C. Son factores de riesgo para la infección: el consumo de drogas por vía endovenosa, el haber recibido transfusiones antes del año 1992, los hemofílicos que recibieron hemoderivados antes de 1987, hijos de madres con virus de la hepatitis C, personas que hayan mantenido contactos sexuales de riesgo o la exposición ocupacional, personas con piercings o tatuajes.

En los últimos años han aparecido fármacos con alta eficacia para la curación de la hepatitis C que, si se administran en etapas iniciales de la enfermedad hepática, pueden evitar el desarrollo de cirrosis y carcinoma hepatocelular en el futuro.

En este sentido, la Dra. Llerena apunta que "es fundamental la realización del cribado ecográfico semestral en pacientes con cirrosis previa, ya que es la principal arma diagnóstica. A pesar del cribado en pacientes con cirrosis, una gran parte de los casos continúan diagnosticándose en etapas avanzadas de la enfermedad".

- Limitar el consumo de alcohol. El abuso de alcohol debe evitarse en la población general y sobre todo en pacientes con una enfermedad hepática subyacente. El consumo de riesgo ha sido definido como un consumo casi diario superior a 40gr de etanol al día (más de 4 unidades de bebida estándar en varones) y superior a 24 gr de etanol al día (más de 2 unidades de bebida estándar en mujeres). Estos datos son equivalentes a un consumo semanal superior a 21 unidades de bebida estándar para varones y a 14 unidades de bebida estándar para mujeres.

Un consumo por encima del determinado dobla el riesgo de padecer enfermedades hepáticas (el 60% presentará alteraciones hepáticas al cabo de 10 años), y otro tipo de enfermedades y cánceres relacionados.

- Modificar el estilo de vida

Vigilar el peso

Hacer ejercicio

Llevar una dieta saludable

Controlar los factores de riesgo cardiovascular (obesidad, diabetes, hipertensión, hipercolesterolemia) son fundamentales para prevenir el aumento de casos de hepatocarcinoma que se relacionan con la enfermedad hepática por depósito graso no alcohólica

Dejar de fumar, ya que el tabaquismo es un factor de riesgo para el desarrollo de un hepatocarcinoma

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