Publicidad
Publicidad

Los cardiólogos demandan más recursos y menos burocracia

La Sociedad Española de Cardiología, en el marco de su Congreso Anual, que se celebra del 17 al 19 de noviembre en Barcelona, ha dado a conocer los resultados de su estudio e-Motiva. En él, se ha analizado la percepción de los cardiólogos sobre su situación profesional y personal.

17/10/2019

eMotiva es el estudio socioprofesional llevado a cabo por la Sociedad Española de Cardiología (SEC), con el apoyo de Amgen, para valorar la situación profesional y personal que viven los cardiólogos en nuestro país. Todo, en un contexto complicado como es el actual: exceso de carga asistencial; mayor responsabilidad desde ...

eMotiva es el estudio socioprofesional llevado a cabo por la Sociedad Española de Cardiología (SEC), con el apoyo de Amgen, para valorar la situación profesional y personal que viven los cardiólogos en nuestro país. Todo, en un contexto complicado como es el actual: exceso de carga asistencial; mayor responsabilidad desde el punto de vista profesional y como gestor de la eficiencia; necesidad de puesta al día permanente; escasez de recursos por la crisis, y la formación de nuevos profesionales y laborales de gestión del día a día. "Queríamos conocer el retrato de cómo están funcionando los cardiólogos y cuál es su grado de agotamiento personal y profesional", ha comentado Iñaki Lekuona, coordinador del comité científico del proyecto e-Motiva, quien también ha desgranado los principales resultados que ha arrojado la encuesta.

Cuatro aspectos clave

El primero de ellos está relacionado con la presión asistencial. Yes que el 51,1% de los encuetados ve más de 15 pacientes al día y casi un 10% a más de 25. "Este número da lugar a la dificultad de compaginar la faceta asistencial con la de formación e investigación", ha detallado Iñaki Lekuona. En cuanto al tiempo dedicado a cada paciente también es valorado como insuficiente por parte de la SEC. "La media de tiempo es de entre 15 y 18 minutos por paciente. El hablar con el paciente tiene implicaciones importantes (se genera confianza, mejora la adherencia al tratamiento). Explicar qué significa el tratamiento lleva más de 15 minutos y eso va en detrimento de la calidad asistencial", ha asegurado el coordinador. Asimismo, la falta de tiempo también afecta a la comunicación con las familias de los pacientes: "Las consultas no sólo tienen que ver pacientes, tienen que ver familias", ha explicado Iñaki Lekuona, quien ha aclarado aclara que "si hubiera más tiempo se podría proporcionar información clara y detallada también a los familiares y eso redundaría en un mejor tratamiento para el paciente".

Otro de los aspectos señalados es el exceso de gestiones burocráticas y administrativas. Iñaki Lekuona ha aseverado que "el medico se dedica durante dos o tres horas al día a dialogar con un ordenador. Nosotros lo que queremos es mirar al paciente y dejar de teclear". Y es que todo el tiempo dedicado a tareas administrativas va en detrimento de la dedicación a aspectos clínicos o de mejora de la relación con el paciente. Algo que los cardiólogos consideran primordial. "La tecnología debería ser un facilitador de nuestro trabajo y lograr que nuestra medicina fuera más humana, no hacer que estemos más tiempo mirando al ordenador que al paciente", ha señalado Manuel Anguita, presidente de la SEC.

El cuarto aspecto analizado es la situación laboral de los cardiólogos, la cual es, en palabras de Iñaki Lekuona, "bastante precaria". El 64,8% trabaja más de 40 horas semanales (46,55 horas de media); se realizan una media de 3,4 guardias al mes; el 79,6% no está de acuerdo con su salario; el 49% no cuenta con plaza fija y casi la mitad de los encuestados define su situación laboral como "precaria".

Así, medido el desgaste emocional y profesional, el nivel de estrés de los cardiólogos españoles está en un 7 sobre 10. "Es un desgaste importante", ha indicado Iñaki Lekuona, para luego comentar: "Estamos encantados de ser cardiólogos, creemos que tenemos reconocimiento social, pero empieza a notarse una clara desafección en el sistema sanitario por el trato que se le da".

En España hay un 5,6 cardiólogos por cada 100.000 habitantes, lo que nos sitúa en el rago bajo de todos los países de Europa central y occidental. Y ya se va notando en algunas CC AA donde cada vez es más difícil sustituir a los especialistas jubilados. "Hemos pedido que aumenten un 10-15% los cardiólogos", ha detallado Manuel Anguita.

Como el objetivo del estudio es conocer la situación y, también, poder proponer medidas para intentar paliar la situación, Manuel Anguita ha desgranado las tres propuestas que realiza la SEC para intentar revertir esta situación: estabilidad y dignificación de la profesión; apoyo con personal administrativo que ayuden en las labores burocráticas, y selección de pacientes cardiovasculares que precisan de seguimiento continuo.

Publicidad
Publicidad
Nuestros Podcasts