La Farmacia Hospitalaria, inmersa en la lucha contra el impacto medioambiental de los sistemas sanitarios

En el 68º Congreso de la SEFH se ha dejado constancia, a través del contenido de su programa científico, de que la Farmacia Hospitalaria está dispuesta a la transformación precisa con el fin de conseguir los cambios necesarios que frenen la problemática en aumento del impacto medioambiental de los sistemas sanitarios.

Cabe recordar, al respecto, que en enero de 2022, la SEFH se adhirió al Pacto Mundial de las Naciones Unidas relacionado con el cumplimiento de los ODS2030, siendo la primera sociedad científica incluida en dicho pacto, no en vano, la farmacia hospitalaria tiene entre sus competencias algunas relacionadas con tres conceptos incluidos en la definición de sostenibilidad: sociedad, economía y medioambiente, como se puso de manifiesto en la sesión " Sostenibilidad ambiental en Farmacia Hospitalaria" .

" Los servicios de farmacia somos estratégicos en la reducción del impacto medioambiental de los sistemas sanitarios y debemos luchar por una salud global y demostrar nuestro compromiso con la transformación necesaria para conseguir la excelencia en la atención de los pacientes y de la sociedad por un mundo mejor ahora y en el futuro" , subrayó María Reyes Abad Sazatornil, jefe del Servicio de Farmacia del Hospital Universitario Miguel Servet, de Zaragoza.

En el caso concreto del medicamento empieza su viaje en su producción y administración al paciente, hasta llegar al medio ambiente, siendo depositado en aguas que vierten a los ríos " hay fármacos repartidos por los ríos de todo el mundo a concentraciones que suponen un problema en muchos casos, como lo demuestran recientes estudios", indicó Unax Lertxundi, resp onsable del servicio de farmacia de la Red de Salud Mental de Araba.

Es evidente que estamos ante un cambio de paradigma impulsado por el impacto medioambiental de los productos sanitarios. " Sería inimaginable hace tan solo unos pocos años que un medicamento pudiera ser retirado del mercado, no porque no fuera eficaz o por su seguridad, sino por resultar un problema para la salud ambiental y por su impacto en la huella de carbono ".

La medida ha sido adoptada por Escocia , que se ha convertido en e l primer país del mundo en dejar de utilizar en sus hospitales el anes tésico desflurano debido a la amenaza que representa para el medio ambiente.

Ante la nueva realidad, como indicó Lertxundi. " hemos propuesto la redefinición del concepto de `uso racional del medicamento´, que data de 1985, época en que lo concerniente a la salud ambiental no preocupaba de la misma forma que actualmente. Consideramos necesario que se incorpore la filosofía ` One Health ´ en la nueva definición". Al mismo tiempo se pueden tomar medidas para que la biodegradación de los fármacos se realice de una forma más rápida y no permanezcan tanto tiempo en el medio ambiente ".

La propia EMA, en el caso de los medicamentos de uso veterinario, tiene en cuenta el criterio de impacto ambiental a la hora de decidir si se aprueba o no un fármaco. Puede ser que se rechace su autorización de comercialización por esta causa. Ha estado a punto también de suceder para los de uso humano, aunque, al parecer, de momento ha quedado parado, a la espera de una nueva normativa europea.

Contaminantes emergentes

En otra de las sesiones contempladas en el programa científico del Congreso de la SEFH se volvió a incidir sobre la problemática de los medicamentos como "contaminantes emergentes".

No en vano, como se puso de manifiesto en la mesa "La cara B de los medicamentos" , de los 4.000 principios activos existentes, actualmente, al menos en cerca ya de 1.000 se han detectado efectos sobre el medio ambiente . Prácticamente, cualquiera de las etapas del ciclo del medicamento puede ser una vía de entrada y de escape en el terreno medio ambiental con las consiguientes consecuencias.

Como señaló Saioa Domingo, responsable del Servicio de Farmacia d e la Organización Sanitaria Integrada de Alto-Deba, de Guipúzcoa, "esta cara B de los medicamentos todavía no es del todo conocida, por lo que hay que contar y atraer a todos los profesionales sanitarios, ya que tradicionalmente se han ocupado más de esta problemática expertos relacionados con el medio ambiente" "La farmacia hospitalaria como agentes del uso del medicamento tenemos que involucrarnos en la solución a este problema tanto a nivel de investigación como en la práctica clínica diaria ".

Se mostró optimista al respecto, al comprobar que el interés por este tema va creciendo. En este sentido, recordó que la Sociedad Europea de Farmacia Hospitalaria ha creado un grupo de trabajo q ue se presentará en el próximo Congreso de Burdeos (Francia) en 2024, que tiene como lema "Salud sostenible".

Finalmente, el director de comunicación y sostenibilidad de SIGRE, Mario Zarzuela , se refirió a la contribución de SIGRE en este problema medioambiental, en el ejercicio de su actividad como SCRAP, lo que ha permitido en los casi últimos 20 años garantizar la adecuada gestión de los residuos de medicamentos y sus envases.

Zarzuela mostró una especial preocupación por la resistencia a los antibióticos. "La propia ONU lo ha calificado como uno de los 10 problemas más importantes a nivel global, no en vano en 2050 puede causar más muertes que el cáncer" , tal como señaló

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