IM MEDICO #66

43 Con motivo del Día Mundial contra el Cáncer, el pasado 4 de febrero; la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) insistió en la importancia de acudir, al menos, a una revisión ginecológica anual, ya que puede ser clave para la detección precoz de una patología tumoral en el útero, el cuello del útero o los ovarios. El Dr. Javier de Santiago, presidente de la Sección de Ginecología Oncológica de SEGO, recordó entonces que algunos de los tumores ginecológicos son “asintomáticos o producen síntomas que pueden relacionarse con otras patologías, incluso no ginecológicas, como puedan ser las digestivas o del sistema urinario”. Por eso es tan primordial realizarse chequeos periódicos con un especialista en ginecología. Cuanto más precoz sea la detección del tumor, “mayores probabilidades habrá de curación y de disminuir las secuelas asociadas al tratamiento”. Factores muy diversos SEGO repasó la situación en este ámbito. Los factores de riesgo que favorecen la aparición de un cáncer ginecológico son muy diversos. De los pocos cánceres del que se sabe su causa es el de cuello uterino, que está producido por un virus en un 98% de los casos, el Virus del Papiloma Humano, que se transmite por vía sexual. Se puede detectar y hacer una prevención, tanto mediante tomas en el exudado de la vagina o del cuello del útero, como a partir de una prevención primaria mediante la vacunación contra el VPH, respectivamente. Del resto de los cánceres ginecológicos se desconoce en gran medida el origen de su causa, aunque sí se tiene constancia de ciertos factores predisponentes. Por ejemplo, del cáncer de útero (o de endometrio) existe una tipología que tiene como factores de riesgo la obesidad, no haber tenido hijos, la hipertensión o la diabetes. Hay otros tumores, como los de ovario, que, aunque no se sabe la causa, sí pueden desarrollarse en base a factores genéticos o hereditarios. Al margen del cáncer de mama, tratado en muchas ocasiones por parte de ginecólogos y uno de los tumores más comunes en la mujer, los cánceres ginecológicos más prevalentes en España son el de útero, seguido del de ovario y el de cuello uterino. Asimismo, existen otros menos frecuentes, como son el cáncer de vulva, de vagina o el de trompa. Cáncer de mama El 19 de octubre se conmemora el Día Mundial contra el Cáncer de Mama. Octubre es el mes de sensibilización sobre la realidad de esta enfermedad y sobre la importancia de la investigación para seguir mejorando la supervivencia y calidad de vida de las personas afectadas. Se estima que, en nuestro país, una de cada ocho mujeres desarrollará cáncer de mama a lo largo de su vida. Con más de 34.000 diagnósticos cada año, es el tipo de cáncer más frecuente entre las mujeres por delante de los tumores colorrectal, de útero, de pulmón y de ovario. De hecho, en España, aproximadamente el 30% de todos los cánceres diagnosticados son de mama. El Grupo GEICAM de Investigación en Cáncer de Mama justifica que, gracias a la investigación y a los avances producidos en los últimos años, a día de hoy el porcentaje de personas que superan la enfermedad a los cinco años del diagnóstico es elevado y es más del 80%. Sin embargo, hay que tener en cuenta que todavía se trata de una enfermedad no resuelta en su fase metastásica (es decir, cuando el cáncer de ha extendido a otras partes del organismo), y que hasta un 30% de pacientes con un diagnóstico temprano tendrá una recaída con metástasis incluso varios años después de haber finalizado sus tratamientos. En la actualidad, aún un 5-6% de todos los cánceres de mama se diagnostica en fase metastásica. Cáncer de endometrio o útero Es el cáncer más frecuente del aparato genital femenino en los países desarrollados. La edad media del diagnóstico es a partir de los 60 años, tras la menopausia. Globalmente es el cuarto cáncer más frecuente en la población femenina, tras el cáncer de mama,

RkJQdWJsaXNoZXIy NTI5ODA=