IM MEDICO #65 ANUARIO 2023

57 nes de acceso y equidad para garantizar que los pacientes que puedan beneficiarse de estas terapias tengan la oportunidad de recibirlas, independientemente de factores económicos o geográficos. En alusión a la capacitación del personal, “la administración de algunas terapias avanzadas puede requerir habilidades especializadas por parte del personal médico”. La capacitación adecuada del personal de atención médica es crucial para garantizar la correcta aplicación y seguimiento de estos tratamientos. Dada la novedad de muchas terapias avanzadas, “es fundamental establecer sistemas de seguimiento a largo plazo para evaluar la seguridad y eficacia a medida que se implementan en entornos clínicos del mundo real”. En lo que a regulación y colaboración se refiere; “un marco regulatorio sólido es esencial para garantizar la seguridad y eficacia de las terapias avanzadas” y “colaboraciones entre la industria, reguladores y profesionales de la salud son clave para establecer estándares y protocolos efectivos”. La colaboración entre la industria farmacéutica, instituciones académicas, reguladores y proveedores de atención médica es crucial para facilitar la investigación, desarrollo, producción y administración eficientes de tratamientos avanzados. En general; “la ordenación de la producción y administración de terapias avanzadas requiere una perspectiva integral que abarque desde la fase de desarrollo y fabricación hasta la aplicación clínica y el seguimiento a largo plazo”. -Jesús Rodríguez Pascual. Las terapias avanzadas, casi por propia definición, requieren de una dotación tecnológica y de un nivel de preparación profesional muy elevados. Jesús Rodríguez Pascual subraya que, generalmente, sólo están al alcance de pocos centros y requiere para su puesta en marcha de una inversión importante. Además, “el propio tratamiento tiene unos costes extraordinariamente elevados”. En esta situación, “necesariamente se precisa agrupar este servicio en centros que agrupen un número suficiente de casos”. En ciudades como Madrid o Barcelona, puede que no sea tan problemático; pero en otras muchas regiones del país puede ser complejo. Igualmente, “requerirá de la movilización del paciente hacia sitios donde esta tecnología esté disponible”. -Mariluz Amador. Mariluz Amador opina que, en este ámbito, no se pueden hacer muchas consideraciones generales: “Debemos analizar mejor caso por caso, porque cada patología presenta su perfil propio y estamos ante un tema muy complejo”. Puntualiza que, en términos más generales, sí se puede decir que es importante que seamos capaces de garantizar la eficacia y seguridad de estas terapias avanzadas, así como el acceso equitativo a las mismas. De acuerdo con sus palabras, “esto implica establecer regulaciones sólidas, contar con una infraestructura adecuada y también, y esto es muy importante, basarnos en la colaboración entre los diferentes actores involucrados, incluyendo la industria farmacéutica, los profesionales sanitarios y los reguladores”. -César Gregorio Muñoz Sánchez- Miguel. Para César Gregorio Muñoz Sánchez- Miguel; “dichas terapias avanzadas suponen un reto actual para los sistemas sanitarios”. Por un lado, “se requiere una compleja logística para desarrollarlas: instalaciones certificadas, profesionales altamente cualificados y acreditados por las autoridades competentes”. Todo ello lleva a altos costes de producción. Por otro lado, “aunque son terapias seguras, también se requiere centros acreditados y con experiencia para su administración, dado que, por ejemplo, las células CAR-T, presentan efectos secundarios que requieren protocolos de actuación perfectamente sincronizados con la implicación de diferentes especialistas sanitarios entrenados y con experiencia.” Según Amador, en este terreno hemos avanzado de forma importante en los últimos años, “existiendo un gran interés en la comunidad científica y médica debido a su potencial para tratar enfermedades que anteriormente carecían de opciones terapéuticas efectivas”. Manifiesta que, hoy por hoy, entre todos están logrando “avances importantes en el desarrollo de terapias avanzadas para diversas enfermedades, como el cáncer, enfermedades genéticas raras y trastornos del sistema inmunológico”. Respecto al futuro, analiza que tiende hacia la combinación de la terapia génica y la terapia celular, “buscando una sinergia entre ambas en el desarrollo de tratamientos más personalizados, eficaces y seguros”. Por el lado contrario, Rodríguez Pascual piensa que se está moderando el entusiasmo inicial, “ya que vemos que este tipo de terapias son eficaces sólo en ciertos tipos de tumores, no en otros”. “Y en ese tipo de tumores, sólo en determinadas condiciones”, añade. Sin embargo, se están tratando con éxito ciertas patologías (como algunos tipos de leucemia aguda), cuando hace poco tiempo eran rápidamente mortales. “Lo cierto es que estamos en el inicio del camino”, expresa. Ayuso y García-Olmo señalan que “las terapias avanzadas están explorando el tratamiento de prácticamente todas las necesidades médicas no cubiertas”. De hecho, hay más de 5.000 ensayos clínicos inscritos en los repertorios internacionales que intentan testar su factibilidad, seguridad y eficiencia en el ser humano. En España, la Red de Terapias Avanzadas (TERAV), del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), recoge tres programas: Terapia Génica, Inmunoterapia con células con anESPAÑA ES UNO DE LOS PAÍSES EUROPEOS DONDE MÁS INVESTIGACIÓN Y ENSAYOS CLÍNICOS SE REALIZAN EN TERAPIAS AVANZADAS

RkJQdWJsaXNoZXIy NTI5ODA=