im MÉDICO | 58 [ ANUARIO 2022 ] 79 mejora extraordinaria en los últimos 40 años. Estos avances han sidoposibles gracias al fácil acceso a las células tumorales a través de un análisis de sangre, lo que se conoce como biopsia líquida, o mediante el examen de la médula ósea, que ha permitido un gran desarrollo en su conocimiento celular. No hay duda de que, a medio y largo plazo, los hematólogos serán capaces de aplicar una verdadera medicina personalizada, administrando a cada paciente el tratamiento más eficaz y en la cantidad adecuada. En los últimos años ha habidomuchos avances en el tratamiento de las hemopatías malignas con inmunoterapia, especialmente con los anticuerpos monoclonales y, en particular, con los biespecíficos, pero la gran protagonista sigue siendo la terapia CAR-T. Su irrupción en el tratamiento del cáncer hematológico supone un cambio de paradigma que no tiene parangón en la historia reciente de la medicina. Por primera vez, se dispone de una terapia basada en células vivasmodificadas genéticamente, que identifican y destruyen específicamente células tumorales. Enpalabras del hematólogoyexpresidentede laSociedadEspañola de Hematología y Hemoterapia (SEHH), Ramón García Sanz, “es el triunfo del conocimiento profundo de la biología del sistema inmune y de las nuevas herramientas de edición génica y el máximo exponente de lamedicina personalizada”. Por otro lado, el númerode trasplanteshematopoyéticos sigueaumentandoentodoelmundograciasaunamayordisponibilidadde donantesyaque lapoblacióndianavacreciendoenedad.Además, continúan mejorando los resultados de este tratamiento gracias a un mejor manejo de la enfermedad de injerto contra huésped y de los procesos infecciosos. Sin embargo, la introducción de las células CAR-T está modificando las indicaciones del trasplante hematopoyético y se espera que siga haciéndolo en el futuro. Como decimos, el linfoma no Hodgkin, que engloba a muchos tipos de linfomas, es la enfermedad hematológica maligna más frecuente ennuestropaís, seguida del mielomamúltiple. MªVictoriaMateos, presidentade laSociedadEspañoladeHematología y Hemoterapia (SEHH), señala que, en el ámbito de las neoplasias de la sangre, “nos encontramos es una situación muy positiva”. “Fundamentalmente, porque hay una gran cantidad de avances en toda la hematología en general”, afirma. Sostiene que lo más relevante son las terapias avanzadas. Considera que, hoy por hoy, “los linfocitos CAR-T siguen siendo los grandes protagonistas en cuanto a los últimos avances en la especialidad”. La investigación clínica ha ido de una manera rápida y positiva. Prueba de ello es que las agencias reguladoras han aprobado estos CAR-T para pacientes con leucemia aguda linfoblástica, para el linfoma B difuso de las células grandes, para el linfoma de las células del manto y, actualmente también, para mieloma. En concreto, en linfoma B difuso de las células grandes, hay un grupo de pacientes, en torno a un 30-40%, que permanecen vivos y libres de progresión a cinco y seis años. Indica que “todos estos linfocitos CAR-T empiezan a moverse ya hacia líneas mucho más precoces en el tratamiento de cualquier enfermedad hematológica y, por lo tanto, entramos dentro de la posibilidad de tratar a más pacientes con estas estrategias terapéuticas”. Mateos comenta que se están investigando la terapia CAR-T en enfermedades incluso no hematológicas. Expone que se ha puticados en España en el año 2022 es de los 280.100 casos según los cálculos de REDECAN, lo que supone un ligero incremento con respecto a los años anteriores. De estos, los tumores hematológicos suponen el 7,2% del total. Así, se estiman 20.146 nuevos casos de cáncer hematológico en España para el año 2022, distribuyéndose en 9.514 casos de linfoma no Hodgkin, 6.079 casos de leucemias (agudas y crónicas), 2.963 casos de mieloma múltiple y 1.590 casos de linfoma de Hodgkin. Dentro de los tumores hematológicos, el linfoma no Hodgkin es el más frecuente, situándose como el quinto tumor más frecuentemente diagnosticado en España, únicamente por detrás de otros tumores como son los de colon y recto, mama, pulmón y vejiga urinaria. Avances para una mayor supervivencia Actualmente, la hemato-oncología cuenta con un amplio e importante arsenal terapéutico que está incrementando la supervivencia de los pacientes con cánceres hematológicos. El pronóstico de estas enfermedades neoplásicas ha experimentado una ¿Cuáles son los retos de su especialidad a medio y corto plazo? Mª Victoria Mateos: “En primer lugar, que los fármacos aprobados lleguen lo antes posible a todos los pacientes. Esto se hace extensivo, por supuesto, a las terapias avanzadas. Se sabe que muchas veces hay un retraso importante entre las aprobaciones por parte de las agencias reguladoras y el momento en el que el tratamiento llega al paciente. El segundo gran reto, probablemente, sea el impulso y la consolidación de una medicina de precisión en el Sistema Nacional de Salud. Eso implicaría que, basado en características genéticas del paciente, en características ambientales, características personales, el tratamiento sea lo más individualizado posible. Con estas estrategias de medicina precisión, seríamos cada vez más capaces de dar lo más importante o lo más necesario para cada paciente. Los tratamientos seguramente serían mucho más eficientes y, por lo tanto, coste-efectivos”. Raúl Córdoba: “Uno de los principales retos de la hematología es la labor de concienciación de la existencia de estas enfermedades en la sociedad. Otro de los retos a los que nos enfrentamos es el envejecimiento de la población española. La OCDE estima que, en 2040, España tenga la población más envejecida del planeta, lo cual hará que la gran mayoría de los pacientes con tumores hematológicos sean pacientes de edad avanzada y con otras enfermedades, por lo que nos tendremos que enfrentar al reto de crear equipos multidisciplinares con otros especialistas para poder diseñar un traje a medida de cada paciente y hacer una verdadera medicina centrada en el paciente. Y finalmente, otro reto al que nos estamos enfrentando ya es al de la sostenibilidad del sistema sanitario y al acceso a fármacos innovadores”.
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