IM MEDICO #53

im MÉDICO | 53 55 En A pie de consulta nos acercamos a los centros de trabajo de los médicos para saber más de su día a día. Conversamos con ellos para conocer cómo desarrollan su trabajo, cuáles son sus inquietudes y demandas en una época como la actual. Marta Legeren vive la profesión desde dentro con una clara vocación. Lleva más de cinco años como oncóloga y ha trabajado en dos comunidades autónomas, lo que le ha valido para tener una visión de conjunto de la especialidad. “Cuando terminé la residencia en Granada, tenía que buscar mi futuro laboral fuera, así que, sin pensarlo dos veces, hice lasmaletas e iniciémi andadura como oncólogamédica en el Hospital Universitario de Burgos. Una experiencia inolvidable que me hizo aprender muchísimo”. Más tarde, Marta Legeren pudo volver al que ella llama “mi hospital” y, actualmente, trabaja comooncólogaenel Hospital UniversitarioClínicoSanCeciliode Granada. “Megustadecir que esmi hospital conmayúsculas, porque la residencia es una época muy bonita, pero de un gran esfuerzo, a la que llegas casi sin saber cómo hablar con los pacientes, y terminas como un oncólogo hecho y derecho”. ¿Cómodefinirías laespecialidad? “Como lamejorquehay”, responde sindudarlo, y puntualiza: “Nuestrospacientes son losmejores, y laespecialidadesunconjunto de actividad asistencial, investigación y actividad docente con la tutorización de estudiantes/residentes”. Una especialidad completa y holística que incorpora la medicina de precisión como elemento imprescindible. “Si bien es cierto que en la medicina nunca dejas de estudiar por el continuo cambio, en oncología esto es nuestro día a día. Se trata de una especialidad en continuo cambio y mejora”. Una enamorada de su trabajo. Así es Marta Legeren, que tiene muy claro qué es lo que falta en una especialidad con un crecimiento exponencial. “Como pasa en casi toda lamedicina en España, hace falta invertir en investigación y en profesionales sanitarios, tanto en su contratación como en su formación continuada”. La precariedad de nuevo como uno de los males de un sistema de salud basado en la excelencia, pero aquejado de la falta de recursos económicos y de capital humano. “Los oncólogos médicos somos, además demédicos oncólogos,médicos coordinadores”, nos relataMarta Legeren, y continúa: “Tenemosuna labor esencial e intransferibleen laprescripciónycontrol de toxicidadde los tratamientos, pero además somos la figura alrededor de la cual gira la enfermedad de nuestros pacientes, ya que coordinamos el proceso integral del paciente oncológico con la imprescindible colaboración del resto de personal sanitario/especialidades del hospital”. Sin duda, unamultidisciplinar y global, pues integra todo el proceso de seguimiento del paciente. Individualidad, precisión y profesionalidad, eso es lo que caracteriza a los oncólogos españoles hoy en día. “El Covid-19 ha puesto a prueba la oncología; lo pasamos muy mal, pero estuvimos con consultas presenciales todo el tiempo, obviamente limitando el tiempo de estancia hospitalaria al máximo y reduciendo las consultas de revisiones a personas sanas”. Y es que la asistencia oncológica siempre continuó al pie del cañón, “aunque sí experimentamos un significativodescensode laactividadenotras especialidades con repercusióndirectaenun incremento en nuestro trabajo y en retrasos diagnósticos”. Marta Legeren se despide de nosotros no sin antes comentarnos su opinión acerca de la coexistencia pacífica de la sanidad pública y privada. “Sin duda, es un tema muy controvertido, pero creo que una adecuada gestión y colaboración entre ambas favorece a todos”. “Falta invertir en investigación y en profesionales sanitarios, tanto en su contratación como en su formación continuada” MARTA LEGEREN (ONCÓLOGA MÉDICA DEL HOSPITAL UNIVERSITARIO CLÍNICO SAN CECILIO DE GRANADA) Nº COLEGIADA: 181810900

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