IM MÉDICO #41

im MÉDICO | 41 71 coste para el sistema sanitario, debido al incremento de la estan- cia hospitalaria, el gasto antibiótico, la necesidad de ingreso en UCI o los reingresos hospitalarios. IQL más frecuentes y tratamientos El doctor explica que las ILQ son las infecciones que se producen a cualquier nivel de los tejidosmanipulados en una intervención quirúrgica. Y se diferencian por su profundidad en el organismo y pueden localizarse en la incisión quirúrgica o más profundas, en los espacios intervenidos, como la cavidad abdominal. “ Las más frecuentes son las infecciones superficiales, que se producen a nivel de la herida quirúrgica. Afortunadamente son las más leves y las que producenmenos dolor o disfunción al paciente”. Las ILQ superficiales afectan sólo a la piel y el tejido subcutáneo de la herida y se solucionan sólo con retirar algún punto, abrir moderadamente la herida y permitir que la infección o el pus se exteriorice.“ Conunospocosdíasde lavadoconsueroocon laducha habitual del paciente suele ser suficiente y casi siempreno se requiere ni un tratamiento antibiótico”, apunta. Por el contrario, las infeccionesprofundas y las queafectanaespa- cios del organismocomoel abdomen, la cavidadpleural oel lugar de colocación de una prótesis ortopédica sonmás graves,“ ponen enpeligrolavidadelpaciente,requierentratamientosantibióticosya vecesreintervenciones,yocasionanmayorgastosanitarioyestancias hospitalarias prolongadas”. El jefe del Departamento de InfecciónQuirúrgica del Hospital Ge- neral deGranollers expone que, actualmente, los estudios en este ámbito van encaminados a analizar la eficacia de cada una de las medidasdeprevenciónqueseproponen;evaluarsugradodecum- plimiento; yanalizar si laagrupacióndevariasdeestasmedidas en formadepaquetesobundlesmejoransucumplimientoyeficacia. El Observatorio de Infección en Cirugía de la AEC Desde la Asociación Española de Cirujanos se promovió el naci- miento del Observatorio de Infección en Cirugía, una iniciativa colaborativa que parte de la Sección de Infección Quirúrgica de la AEC, “ por nuestra preocupación por todo lo relacionado con la infección y la cirugía. La AEC tiene una larga tradición en el estudio y tratamiento de la infección quirúrgica, pero pensábamos que de- bíamos abrirnos a otras especialidades con inquietudes similares y emprender proyectos colaborativos ”, responde el doctor. Consideranprimordial la cooperaciónentrediversas especialida- des y estamentos para solucionar los problemas.“ Haynumerosas experienciasquedemuestranque losproblemashayqueabordarlos desde dentro, de abajo a arriba, y que las mejores soluciones apa- recen cuando se implica al personal de base en la resolución de la complicación. Creemos que cualquier iniciativa para la reducción de la infección postoperatoria debe ser diseñada conjuntamente “En general, sufren una infección postoperatoria entre el 1% y el 15% de los pacientes que se operan” del tracto urinario, los abscesos de la piel, de partes blandas o de la boca, etc ”. Y entre las segundas, el doctor destaca que son las que se pueden producir como consecuencia de la actividad quirúrgica.“ Enunaoperación rompemos lasbarrerasnaturalesque nos defienden de la infección (la piel, las mucosas) y casi siempre entramos en espacios o cavidades que normalmente son estériles, con la posibilidad de contaminarlos ”. También destaca que, durante una operación, precisamente se entra en las zonas más contaminadas del organismo, como es el caso de la cirugía del colon y del recto, donde intervienen órga- nos cargados con trillones de bacterias, la famosamicrobiota del colon. “ No es de extrañar que en esta última sea donde se da una tasa de infección postoperatoriamás alta”. Según el doctor, las especialidades quirúrgicas se enfrentan si- multáneamente a estas dos vertientes de la infección y estudian, primero, cómo abordar las infecciones que tienen tratamiento quirúrgico, y cómo prevenir y tratar las segundas, las infecciones postoperatorias. Evolución de las infecciones quirúrgicas En las últimas décadas, según narra Josep M. Badia, la infección de la cirugía, también llamada infección postoperatoria o, más técnicamente, infección de la localización quirúrgica (ILQ), ha cobrado un progresivo protagonismo en los hospitales. “ Las infeccionesqueseproducenen los centros sanitarios son lasdenomi- nadas infecciones nosocomiales, que ahora preferimos denominar infecciones relacionadas con laasistenciasanitaria (IRAS).Destacan las infeccionesurinarias, respiratorias, infeccionesdecatéter y, como no, las infecciones postoperatorias”. En estos momentos, con datos europeos y españoles (por ejemplo, el informe del estudio EPINE 2019 de prevalencia de infección nosocomial en España), la ILQ se ha convertido en la primera de las IRAS. Así, según los datos del estudio, una de cada cuatro infecciones que se producen en los hospitales son quirúrgicas.“ Esto se debe, por un lado, aque las otras infecciones handisminuido suprevalen- cia gracias a la implantación de medidas de prevención especiales y, por otro, porque se realizan intervenciones cadavez complejas en pacientesmás debilitados y conmás factores de riesgode infectarse en el postoperatorio”. Si bien el doctor reconoce que la complejidadde las operaciones ha ido en aumento (trasplantes múltiples, grandes resecciones de tumores, etc.) y, además, operan una tipología de pacientes que antes no se intervenían (edades progresivamentemás avan- zadas, enfermedades concomitantes debilitantes, tratamientos inmunosupresores, etc.) En general, sufren una infección postoperatoria entre el 1% y el 15% de los pacientes que se operan, siendo las diferencias debi- das al tipode intervención. Enuna cirugía limpia, comodemama u ortopédica, la infección suele estar por debajo del 1%, pero en la cirugía colorrectal puede llegar a ser del 15%o incluso superior. La infección postoperatoria es la complicaciónmás frecuente de la cirugía y una de las que preocupa más al cirujano y a todo el equipo quirúrgico. Además del inconveniente que supone para la salud del paciente, estas infecciones provocan un importante