Publicidad
Publicidad

La nanotecnología de vanguardia mejora la sensibilidad de las pruebas rápidas

Tener al alcance herramientas de diagnóstico más sensibles, rápidas y accesibles, tanto para pruebas clínicas como domiciliarias, resulta imprescindible para detectar a tiempo y en etapas tempranas afecciones potencialmente mortales, como accidentes cerebrovasculares o infartos, que, de otra forma, pueden pasar desapercibidas.

Estado: Esperando

07/04/2025

Las tiras reactivas rápidas en papel, también conocidas como inmunoensayos de flujo lateral (IFL), permiten detectar fácilmente biomarcadores que indican la presencia de patógenos o estados de salud específicos. Sin embargo, las convencionales, a menudo, no detectan biomarcadores esenciales que solo existen en cantidades traza en sangre, saliva u orina. ...

Las tiras reactivas rápidas en papel, también conocidas como inmunoensayos de flujo lateral (IFL), permiten detectar fácilmente biomarcadores que indican la presencia de patógenos o estados de salud específicos. Sin embargo, las convencionales, a menudo, no detectan biomarcadores esenciales que solo existen en cantidades traza en sangre, saliva u orina. Como resultado, afecciones potencialmente mortales como accidentes cerebrovasculares o infartos pueden pasar desapercibidas en etapas tempranas.

Ahora, un grupo de investigación dirigido por Heini Ijäs, Maximilian J. Urban y Tim Liedl, de la Universidad de Múnich (LMU), ha logrado mejorar significativamente estas pruebas mediante una nanotecnología de vanguardia llamada 'origami de ADN'. El mecanismo empleado pasa por el pliegue del ADN  (similar al arte japonés de doblar papel) para crear estructuras a nanoescala de prácticamente cualquier forma.

En este caso, los investigadores diseñaron un amplificador a nanoescala que aumenta sustancialmente la sensibilidad de los IFL, según se publica en 'Nature Communications' donde se explica cómo la técnica mejora las pruebas para una variedad de biomarcadores, incluido el marcador de ataque cardíaco, la troponina cardíaca I (cTnI), y el marcador de accidente cerebrovascular, la cadena ligera de neurofilamentos (Nfl).

"Nuestra tecnología permite un control inigualable del factor de amplificación, lo que aumenta la fiabilidad y eficacia de las pruebas IFL en aplicaciones clínicas. Esta innovación tiene el potencial de detectar, mediante las pruebas diagnósticas, una amplia gama de enfermedades", según el Dr. Heini Ijäs, autor principal.

Solución versátil

El método se adapta a diversos biomarcadores y muestras, incluidas las drogas, lo que lo convierte en una solución versátil para mejorar las pruebas rápidas existentes. Según el equipo de investigación, este avance dará lugar a herramientas de diagnóstico más sensibles, rápidas y accesibles, tanto para pruebas clínicas como domiciliarias.

El costo del amplificador molecular es muy asequible por prueba. "Esperamos que la tecnología esté disponible para los médicos en su práctica diaria y mejorar la atención al paciente. Gracias a una subvención del programa de Transferencia de Investigación EXIST del gobierno federal, estamos comercializando la tecnología. Observamos una alta demanda de nuestras pruebas en clínicas y consultorios pequeños sin acceso rápido a laboratorios, así como en servicios de urgencias, donde cada minuto cuenta", concluyó el Dr. Maximilian Urban, miembro del equipo de la Universidad de Múnich.

Autor: IM Médico
Publicidad
Publicidad