Científicos de diversos centros estadounidenses han establecido que las mutaciones G12D o G12V en el gen KRAS son factor de prognosis desfavorable, en pacientes con adenocarcinoma ductal pancreático metastásico. Tanto el riesgo de muerte como el de progresión de la patología fueron significativamente mayores, en comparación con los pacientes sin ...
Científicos de diversos centros estadounidenses han establecido que las mutaciones G12D o G12V en el gen KRAS son factor de prognosis desfavorable, en pacientes con adenocarcinoma ductal pancreático metastásico. Tanto el riesgo de muerte como el de progresión de la patología fueron significativamente mayores, en comparación con los pacientes sin mutaciones en KRAS. En contraste, los pacientes portadores de la mutación G12R exhibieron la mayor supervivencia global, que alcanzó una mediana de algo más de 13 meses, así como el periodo de tiempo más largo hasta la siguiente línea de tratamiento, que fue de seis meses. En el conjunto de todos los pacientes el régimen basado en fluorouracilo, irinotecán, oxaliplatino y leucovorina redujo los riesgos descritos en mayor medida que la gemcitabina, con o sin nab-paclitaxel.
Así lo afirma Carter Norton, investigador del Instituto de Medicina Genética McKusick-Nathans y primer autor del estudio, quien prosigue indicando que el cáncer de páncreas será la segunda causa de muerte por cáncer en el año 2040, presentando la mayoría de los pacientes enfermedad incurable. Hasta el 90% de estos pacientes presenta mutaciones activadoras en el gen KRAS de manera temprana, seguidas por alteraciones adicionales en genes oncosupresores, lo que acelera la progresión del tumor, asegura el científico. Dado el creciente número de inhibidores de KRAS actualmente en desarrollo clínico, son necesarios estudios a gran escala, como el actual, con el objetivo de identificar asociaciones entre las mutaciones de este gen y los desenlaces clínicos, concluye Norton.