Chiesi ha inaugurado este martes en Madrid sus premios `Becas Respirar es Vida´ con el reconocimiento a tres proyectos de tres asociaciones de pacientes afectados con algún tipo de patología respiratoria. Estos reconocimientos, apoyados por la Fundación Lovexair, se han entregado a la Asociación Madrileña de Fibrosis Quística, la Asociación de alérgicos y asmáticos de Málaga (ALERMA) y a la Asociación de Pacientes con EPOC (APEPOC).

Como ha señalado Giuseppe Chiericatti, director general de Chiesi, el espíritu de la biofarmacéutica persigue apoyar "proyectos que se han puesto en marcha y que seguirán". Como ha recordado, la compañía destina actualmente hasta un 20% de la facturación global a I+D, y ha avisado que irán "más allá" en ese compromiso para "mejorar la calidad de vida de las personas y los pacientes". Al respecto, los planes de la empresa contemplan ser cero emisiones a nivel interno para 2030, y a nivel externo en 2035.

Además, Chiericatti ha aprovechado para anunciar que habrá una segunda edición de estos reconocimientos, basados en la colaboración y la cocreación e "inspirados por el valor del trabajo compartido", apostamos por personas, sociedad y planeta". Tal como ha secundado la directora de relaciones institucionales de Chiesi, Carmen Basolas, desde 2018 se tomó la determinación de impulsar los "proyectos compartidos" en todas y cada una de las filiales trabajando "en paralelo y de forma transparente" para la sociedad y el medioambiente.

Hacen efectivo así el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) número 17 de Naciones Unidas. Chiesi está adherida, además, a otros diez ODS, con especial hincapié en el número 3: salud y bienestar. "Como laboratorio farmacéutico, trabajamos por y para los pacientes, y sobre todo con los pacientes", ha subrayado.

Así queda de manifiesto con la entrega de las becas, que se han otorgado a iniciativas muy vinculadas tanto a la salud respiratoria como al fomento del cuidado del entorno y la lucha contra el cambio climático. "Las concebimos —señala Basolas sobre estas— para concienciar que en patología respiratoria se podían hacer proyectos que mejoraran el medioambiente. Son pacientes respiratorios y, por tanto, la calidad del aire es importante".

Tras la "horrible" situación vivida por la toda la humanidad con la pandemia, y con unos niveles de contaminación "terriblemente malos" Shane Fitch, presidenta de la Fundación Lovexair, ha expresado su "ilusión por promocionar que se presente y se conozca la situación de estos pacientes. Porque así nos escuchan las instituciones".

Coloquio multidisciplinar

Uno de los actos más constructivos del evento, conducido por la meteoróloga y presentadora Mercedes Martín, ha sido el coloquio que ha reunido a especialistas en salud respiratoria, enfermería, industria y Atención Primaria (AP). Desde la visibilización de las enfermedades respiratorias hasta el control de la cronicidad de los pacientes, los ponentes han incidido en diversos aspectos que afectan a su práctica clínica diaria o distintas líneas de investigación abiertas en diversos frentes.

Es el caso de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC). Javier Montoro, coordinador del Grupo de Trabajo de Alergia sobre Medio Ambiente, Contaminación y Cambio Climático de esta sociedad científica, ha expuesto cómo, a través de una revisión sistemática publicada hace aproximadamente un mes, se ha demostrado que genera más huella de carbono en un paciente con una patología respiratoria prescribir un inhalador menos eficaz (en este caso, de polvo seco) que uno presurizado, a pesar de que este último contamina más con cada uso. "Quitar estos inhaladores por la huella de carbono causaría muchos más problemas para el planeta que dejar a los pacientes con sus inhaladores actuales", ha concluido. En este sentido, Chiesi está desarrollando un inhalador presurizado que contaminaría sensiblemente menos que los actuales.

Por otra parte, de entre los trabajos que llevan a cabo, ha desgranado uno que buscará relacionar síntomas, tratamientos y problemas relacionados con la contaminación; sin dejar de lado los estudios de medición periódicos que registran los más de 60 captadores de polen que la SEAIC tiene repartidos por todo el territorio, y permite determinar el número de granos en aire con el número de exacerbaciones en este tipo de pacientes.

Representando a una parte de ellos, Mariano Pastor, presidente de la Federación Española de Asociaciones de pacientes alérgicos y con Enfermedades Respiratorias (FENAER), ha reprochado que aún a día de hoy estas patologías sigan causando "incomprensión", a la vez que "dificultan la vida" de un paciente con necesidades "que no están del todo cubiertas por el sistema". Por esa razón, ha instado a que se propicien, por ejemplo, la atención multidisciplinar o la fisioterapia respiratoria.

Para los neumólogos, uno de los principales objetivos de los tratamientos persigue tener al paciente respiratorio crónico "controlado", ha asegurado Cristina Martínez, coordinadora del Grupo EROM (Enfermedades Respiratorias de Origen Ocupacional y Medioambiental) de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR). En algunas ocasiones "por falta de adherencia al tratamiento" o, en otras ocasiones, por no poner el foco lo suficiente sobre la prevención o la concienciación, el enfermo con patología respiratoria carece de "control" sobre su enfermedad. "Y se ve en estudios publicados incluso con pacientes sintomáticos que van a Primaria", reconoce.

El profesional de este colectivo, Jesús Molina, que además es coordinador del Grupo de enfermedades respiratorias de semFYC (Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria), ha tomado el testigo de Martínez: "lo que pretendemos es mantener ese control que debe de tener el paciente, y a veces se nos olvida formarles de estas cosas, recordarles que hay mucha contaminación, el problema de las calefacciones, algunos nos comentan que cuando hay tormentas se ponen mucho peor".

Estos pequeños detalles suelen pasar desapercibidos en consulta, donde Molina ha señalado que deberían "hacer recomendaciones a priori, no a posteriori". Ese "mal control" conlleva una "sobrecargar enorme" para la huella de carbono, "pero además para la situación personal del paciente".

Bien lo sabe Julia González, enfermera y miembro de la asociación de pacientes Sevilla Respira. Asmática desde la adolescencia, ha reconocido que en los primeros años llevaba la adherencia al tratamiento a duras penas. Con el tiempo fue mejorándola y además estableciendo una relación de confianza con su médico. Ha querido enfatizar también la importancia de conocer el entorno del paciente con enfermedad respiratoria: "es importante formar a la familia y el entorno del paciente sobre pequeñas cuestiones como hablar de la calidad del aire en el entorno del hogar; el polvo, las humedades o los irritantes tóxicos con los que se limpia la casa".

Todos han coincidido en que los medios de comunicación cumplen una importancia capital en hacer llegar estas cuestiones a los propios pacientes. Sobre ello ha incidido la directora médica de Chiesi, Dolors Querol, quien ha apostado por contar con los expertos para "compartir áreas de conocimiento, generar contextos y, sobre todo, tener una mirada diferente". "Holística", ha precisado, y no solo desde la enfermedad, sino también desde la salud. Algo a lo que Querol ha puesto nombre: "la prevención".

Premiados

La I Edición de la Beca `Respirar es Vida´ ha entregado tres reconocimientos. El primero, dotado con 5.000 euros, ha sido para la Asociación Madrileña de Fibrosis Quística (AMFQ), por su proyecto `Campaña de sensibilización sobre la gestión de residuos generados en los tratamientos respiratorios´. Su presidente Fernando Moreno Pizarro ha sido el encargado de recoger el galardón y de destacar sobre la iniciativa premiada que los propios pacientes desde sus casas cuiden "esa casa mayor" que es el planeta. Además, ha confesado que la dotación económica les permitirá "dar un impulso" en forma de infografías y materiales físicos a este proyecto.

El segundo premio, cuya cuantía asciende a los 3.000 euros, ha sido para la Asociación de alérgicos y asmáticos de Málaga (ALERMA) por su proyecto `Fisioterapia respiratoria en la naturaleza´. Esto servirá para volver a poner en marcha esta acción que se desarrolla en la Laguna Fuente de Piedra de Málaga, "un disfrute para todas las personas, y más para los enfermos respiratorios que apenas pueden salir", ha celebrado María Victoria Palomares, presidenta de la asociación.

El tercer reconocimiento, por valor de 2.000 euros, ha ido a parar a la Asociación de Pacientes con EPOC (APEPOC), por su proyecto conjunto con ECODES: `Cómo afecta el cambio climático y la contaminación atmosférica a los pacientes respiratorios´. La portavoz y asesora técnica de la organización, Nicole Hass, ha destacado la importancia de que todos sean "responsables del medioambiente. Somos una comunidad respiratoria". Por último, ha asegurado que el dinero se invertirá "en hacer más proyectos en esta línea".