Publicidad
Publicidad

Nuevo sello distintivo del envejecimiento

Un grupo internacional de investigadores identifica un nuevo sello distintivo del envejecimiento.

11/01/2023

Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Helsinki (Finlandia) y la École Polytechnique Fédérale de Lausanne (Suiza), y publicado en la revista ´Nature Aging´, ha identificado un nuevo sello distintivo del ...

Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Helsinki (Finlandia) y la École Polytechnique Fédérale de Lausanne (Suiza), y publicado en la revista ´Nature Aging´, ha identificado un nuevo sello distintivo del envejecimiento, evidenciado que durante el mismo las ceramidas, una clase de moléculas de grasa llamadas esfingolípidos, comienzan a acumularse en el músculo, lo que afecta a su función.

A medida que las personas envejecen, la cantidad de tejido muscular suele disminuir y la capacidad funcional se reduce. En el estudio actual, los investigadores observaron que la cantidad de ceramidas y otras moléculas de esfingolípidos en el tejido muscular aumenta cuando los humanos envejecen.

Los expertos investigaron si la inhibición de la producción de ceramida en las células podría detener la sarcopenia o la pérdida de masa muscular asociada con el envejecimiento. Para ello, administraron el fármaco miriocina, que se sabe que inhibe la producción de ceramidas, en la cavidad intraperitoneal de ratones envejecidos.

Así, comprobaron que este tratamiento ralentizaba la sarcopenia en los ratones, preservando su fuerza muscular y mejorando su equilibrio y capacidad de carrera. Del mismo modo, encontraron que los efectos estaban relacionados con la función de las células madre musculares. "Descubrimos que cuando se inhibía la producción de ceramida, la cantidad de células madre musculares y su capacidad funcional se conservaban mejor", han detallado los científicos.

Finalmente, los investigadores querían estudiar si la inhibición de la síntesis de ceramida podría prevenir la pérdida de masa muscular también en humanos. Para ello, utilizaron miles de muestras recolectadas de residentes de Helsinki de 70 a 80 años, observando que el 25 por ciento de los sujetos del estudio tenían una variante genética que tenía el mismo efecto que la miriocina, reduciendo la producción de ceramidas en el músculo.

Publicidad
Publicidad
Nuestros Podcasts