El cáncer de pulmón es, en la actualidad, el que mayor mortalidad presenta de todos los tipos de tumores malignos que se conocen. Esto se debe, en parte, a su difícil y tardía detección. En muchas ocasiones, este hecho es decisivo: por eso, la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) se ha marcado la detección precoz y la prevención como uno de sus principales retos.

Así ha quedado demostrado en la sesión `Las ómicas y el cáncer de pulmón´ que ha tenido lugar este viernes durante el transcurso del 55º Congreso de que se celebra en el Palacio Congresos Baluarte de Pamplona. Y es que este tipo de conjunto de disciplinas, herramientas y tecnologías englobadas en la omica pueden ser un compañero vital en la consecución de este objetivo.

`Metabolómica en el diagnóstico y pronóstico del cáncer de pulmón´ ha sido la conferencia por streaming impartida por el responsable del servicio de Neumología y Alergia del Hospital Juan Ramón Jiménez (Huelva), Antonio Ramón Pereira Vega. El neumólogo ha confesado que el colectivo se centra "en el diagnóstico precoz" para combatir este tipo de cáncer, sin olvidar campañas de prevención como la del tabaquismo o los nuevos tratamientos desarrollados o proyectos como el impulsado por SEPAR, `Cassandra´, que quiere ser un precedente en el diagnóstico precoz de esta patología.

La naturaleza del cáncer de pulmón es clara: nace de una alteración metabólica que afecta a los metabolitos. Estos se "híperexpresan" y es cuando comienza la labor más importante, la de detectarlo cuanto antes. Según ha analizado Pereira, "se podría detectar con técnicas de alta sensibilidad, como con un TAC de baja dosis". A esta hipótesis se suma la de la revolución de los biomarcadores, que están contribuyendo a acelerar los procesos hasta el punto de conseguir determinar un cáncer como este en fase clínica o preclínica.

La clave de estos marcadores biológicos es "diferenciar entre pacientes sanos y con cáncer", ha sintetizado. En concreto, la proteómica podría ser muy útil para determinar los factores ambientales que contribuyen al desarrollo de esta enfermedad, como el tabaco. Como ha indicado, en base a distintas investigaciones llevadas a cabo en este sentido, se han detectado vías metabólicas "claramente relacionadas" con el tabaquismo.

Si bien la magnitud de este engloba en los "más de 150 metabolitos" relacionados con cáncer de pulmón. Para conseguir un diagnóstico `limpio´ se requiere de técnicas metabolómicas mediante "fluidos en suero y sangre" con los que se practican estudios transversales "para encontrar y purificar biomarcadores".

Diversos estudios abordan este campo (PROMOTER, MODIFY, CHAIN…). No obstante, ha matizado que la metabolómica presenta el problema de la "variabilidad", aunque esta se puede solventar con controles de la muestra.

Radiomica e IA para detectar con rapidez el cáncer de pulmón

El turno para la segunda conferencia, cuya sesión ha estado moderada por los doctores Juan Carlos Trujillo Reyes, cirujano adjunto senior del Departamento de Cirugía Torácica del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau (Barcelona), y Pablo Sanchez Salcedo, neumólogo en el Complejo Hospitalario de Navarra (Pamplona), se ha centrado en la vertiente de la radiología.

Gorka Bastarrika Alemañ, del servicio de Radiología Clínica de la Clínica Universidad de Navarra (Pamplona) ha desgranado bajo el título `Promesas de la radiomica y la inteligencia artificial en el cáncer de pulmón´ cómo las nuevas tecnologías pueden jugar un papel clave en simplificar procesos y realizar diagnósticos más efectivos y menos basados en subjetividades.

Teniendo en cuenta que hasta un 26% de personas presenta nódulos pulmonares, de los cuales "solo el 3,6% son malignos", Bastarrika ha considerado que la medicina personalizada va a jugar un papel importante "en el manejo del paciente, y más cuando hay tratamientos dirigidos a subtipos de cáncer".

Actualmente, los radiólogos evalúan el cáncer en distintas escalas, técnica que cambiará en el futuro. Según ha señalado, la Inteligencia Artificial (IA) será la protagonista de este cambio de paradigma "permitiendo predecir y clasificar objetos" asociados al cáncer de pulmón. Otras soluciones, como el Machine Learning, también trabajarán al servicio de la mejora en el trabajo de los profesionales.

"Estos sistemas pueden llegar a detectar hasta el 95% de los nódulos", ha afirmado, basándose en que al poder detectar hasta nódulos de menos de 10 milímetros "y no fallan en esa detección tanto para detectarlos como para caracterizarlos" con una precisión diagnóstica que podría llegar hasta el 96%.

Alteraciones en el ADN mediante biopsias líquidas

La tercera de las vías la ha desvelado Nerea Carvajal García, del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz: detectar el cáncer de pulmón mediante la técnica de las biopsias líquidas. `Presente y futuro de la biopsia líquida en el cáncer de pulmón´ ha sido la oportunidad para obtener una "heterogeneidad plasmada" en muestras seriadas de sangre.

En su exposición, centrada en el ADN tumoral circulante (ADNct), ha adelantado que desde hace años se trabaja en técnicas más sensibles que sirvan para detectar alteraciones en el material genético. Además, permite "individualizar el tratamiento" en base a los resultados obtenidos. Técnicas ultrasensibles como la PCR digital, con una sensibilidad de 0.001; PCR específicas; paneles de secuenciación… son múltiples las vías para la detección. En la `Jiménez Díaz´, ha señalado, trabajan con una técnica muy sensible que sirve para detectar EGFR y además unos 400 biomarcadores a la vez, solo a través de una muestra de sangre.

En definitiva, el futuro inmediato sería alcanzar "la enfermedad mínima residual" que permita ir modulando el tratamiento en base al ADNct detectado.