Para saber más sobre su incidencia, la Dra. Isabel Echavarría (nº colegiada: 282868607), secretaria científica de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y médico del Hospital Universitario Gregorio Marañón de Madrid, destaca que "la incidencia de melanoma en España es mucho menor que en otros países del norte de Europa. No son de los tumores más frecuentes, pero sí son tumores con una mortalidad más alta que otros". Para la experta, el principal factor de riesgo para el cáncer de piel es la exposición solar. Isabel Echavarría resalta que el melanoma es resultado de un daño crónico, "de todo el daño que llevamos acumulado, no del sol que has tomado en este último verano, y por esto lleva mucho tiempo. Probablemente en un futuro veamos un descenso en la incidencia. Por ejemplo, en Australia, que es uno de los países que más incidencia de melanoma tiene, gracias a las campañas de prevención, ya la están disminuyendo porque hay una gran concienciación social".

Prevención, detección precoz y supervivencia

Según Echavarría, actualmente la prevención pasa por protegerse del sol, y destaca la importancia del diagnóstico precoz, "concienciar bien a la población de cómo identificar qué puede ser un melanoma, con la regla del ABCDE, si un lunar es simétrico, si ha cambiado o si está creciendo". Asimismo, "otra regla muy ilustrativa es, en personas que tienen muchos lunares, la regla del `patito feo´, el lunar que no se parece al resto; y con eso, consultar e intentar diagnosticar lo antes posible".

Respecto a la supervivencia, cuanto antes se diagnostica un melanoma, menos riesgo hay de afectación de los ganglios y metástasis. "Eso está muy relacionado con el estadio en el que se diagnostica".

Protocolo de detección

La doctora Echavarría comenta que el protocolo parte de la Atención Primaria que deriva al paciente al dermatólogo, que es quien diagnostica el melanoma. "Generalmente, después del diagnóstico del melanoma, hay que volver a operar, porque es muy importante que haya unos márgenes alrededor del tumor, así que la cirugía tiene que ser amplia. Y luego se presentan en comités de tumores, multidisciplinares, en los que hay oncólogos y dermatólogos, y con eso se observa ve si necesitan más tratamientos, porque hay melanomas que después de la cirugía no van a necesitar nada más, y en cambio otros melanomas con más riesgo necesitan tratamientos complementarios, y ahí ya es cuando se deriva al oncólogo".

Para leer el artículo completo haz clic en el PDF adjunto