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Difunden nuevas recomendaciones para el diagnóstico y tratamiento de la mastitis

Comprender el origen de la mastitis permite a los médicos seleccionar tratamientos efectivos específicos para atajar esta afección.

18/05/2022

La mastitis, o inflamación de la glándula mamaria, es una complicación materna común de la lactancia y contribuye a la interrupción temprana de la misma, y en la que múltiples factores contribuyen a su desarrollo, entre ellos, hiperlactación, factores microbianos como la diversidad del microbioma de la leche y otros ...

La mastitis, o inflamación de la glándula mamaria, es una complicación materna común de la lactancia y contribuye a la interrupción temprana de la misma, y en la que múltiples factores contribuyen a su desarrollo, entre ellos, hiperlactación, factores microbianos como la diversidad del microbioma de la leche y otros relacionados con el uso de antibióticos y probióticos. Asimismo, la reducción de la extracción de leche puede aumentar transitoriamente el dolor y el eritema por distensión alveolar y congestión vascular.

La Academia de Medicina de Lactancia Materna de EEUU (ABM por sus siglas en inglés) ha difundido nuevas recomendaciones para el diagnóstico y tratamiento del espectro de mastitis, a través de la revista ´Breastfeeding Medicine´. Y es que comprender la fisiopatología del estrechamiento y la inflamación de los conductos permite a los médicos seleccionar tratamientos efectivos específicos para la mastitis.

De acuerdo con las pautas ofrecidas en esta nueva guía, muchos síntomas de mastitis se resolverán con atención conservadora (como hielo, AINE y lactancia materna fisiológica) y apoyo psicosocial, remarcando la importancia de continuar alimentando al bebé a demanda, minimizar el uso del extractor de leche y evitar el uso de pezoneras. Las intervenciones incluyen el uso de antibióticos para tratar la mastitis bacteriana, el ultrasonido terapéutico y el uso de probióticos.

Enfoque para nuevas investigaciones

Actualmente, los estudios clínicos sobre mastitis y trastornos relacionados están limitados por el diseño del estudio y los factores no del todo conocidos, según la ABM que pone como ejemplo el "trauma del pezón", extremadamente frecuente en la hiperlactancia, y, por consiguiente, un factor de riesgo para la mastitis.

Asimismo, consideran necesarios más estudios para aclarar la prevalencia de la mastitis bacteriana en oposición a la congestión y/o mastitis inflamatoria. El uso de probióticos también requiere más investigación, a su juicio. Dado que las mujeres en el período periparto tienen el mayor riesgo de desarrollar un trastorno de ansiedad o del estado de ánimo durante su vida, también se debe explorar la distinción entre los síntomas de los trastornos del estado de ánimo y de ansiedad versus la mastitis.

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