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La abstinencia de fumar es un componente fundamental en la atención al cáncer

Muchos pacientes oncológicos no cuentan con el asesoramiento y el apoyo necesarios contemplados dentro de las pautas dirigidas al abordaje del hábito tabáquico basadas en la evidencia.

12/05/2022

Tras un diagnóstico de cáncer, el factor tabaquismo se asocia con peores resultados, tasas de supervivencia más bajas, mayor riesgo de cánceres adicionales y efectos secundarios más frecuentes y graves del tratamiento oncológico. Sin embargo, es posible que muchos pacientes no reciben el asesoramiento y el apoyo establecidos dentro de ...

Tras un diagnóstico de cáncer, el factor tabaquismo se asocia con peores resultados, tasas de supervivencia más bajas, mayor riesgo de cánceres adicionales y efectos secundarios más frecuentes y graves del tratamiento oncológico. Sin embargo, es posible que muchos pacientes no reciben el asesoramiento y el apoyo establecidos dentro de las pautas relacionadas con el abordaje del hábito tabáquico, basadas en la evidencia. En cambio, "la abstinencia de fumar es un componente fundamental de la atención del cáncer", según sostienen expertos.

Un estudio publicado recientemente en el `Journal of Urology´ encontró que las pautas de práctica clínica de la Red Nacional Integral del Cáncer (NCCN, por sus siglas en inglés) (EEUU) eran las únicas que incluían recomendaciones tanto para la detección del tabaco como para dejar de fumar en el caso del cáncer de vejiga,así como que un grupo muy pequeño brindaba ambas recomendaciones como parte de su directrices para el cáncer de pulmón.

Tecnología de la salud frente al tabaquismo

En este contexto, investigadores del Centro de Cáncer Siteman en el Hospital Barnes-Jewish y la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington, miembro del NCCN, han realizado un estudio incorporando tecnología de la salud, a través del programa ´Electronic Health Record-Enabled Evidence-Based Smoking Cessation Treatment´ (ELEVATE, de Epic) para ayudar a los pacientes con cáncer a dejar de fumar.

Para el estudio. se seleccionaron un total de 3.238 pacientes de oncología médica documentados en registros de salud electrónicos (EHR )con hábito tabáquico en el período de pre-implementación (enero a mayo de 2018) y post-implementación (junio a diciembre de 2018). Tras períodos de seguimiento de seis meses, se comprobó que el 12 % de los tratados antes de la implementación de ELEVATE había dejado de fumar documentado, en comparación con el 17,2 % de los tratados después de la implementación.

"ELEVATE ha sido dotado de un módulo de tabaquismo fácil de usar integrado en el registro de salud electrónico que indica las acciones de varios miembros del equipo de atención oncológica para evaluar el estado del tabaquismo, brindar consejos para dejar de fumar, recetar medicamentos y ofrecer una variedad de opciones de asesoramiento a pacientes que fuman", explicó el autor principal, Alex T. Ramsey, investigador de la Universidad de Washington en el Centro de Cáncer Siteman.

Los investigadores también compararon las tasas de abandono del hábito de los pacientes de oncología médica frente a los de oncología quirúrgica y otros de medicina interna en la Universidad de Washington durante los mismos períodos de tiempo, que no tuvieron acceso al programa ELEVATE en ningún momento. Ese grupo de población constaba de 9.719 pacientes que fuman sin un diagnóstico conocido de cáncer. No encontraron cambios significativos en la tasa de tabaquismo entre los dos períodos de tiempo para este grupo sin cáncer.

"Los especialistas en Oncología están trabajando para transformar su práctica clínica e incluir en ella el tratamiento del tabaquismo como parte de la atención de rutina, siempre que esta atención basada en la evidencia esté integrada. ELEVATE ofrece un cambio de paradigma innovador para que las estrategias para dejar de fumar puedan integrarse completamente en la atención oncológica", afirmó una de las autoras principales del estudio, Li-Shiun, Chen.

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