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"La psiquiatría infanto-juvenil ha sido más vulnerable durante la pandemia"

"Desde la pandemia han aumentado las visitas en psiquiatría infanto-juvenil en HUSM Lérida un 5,4%", asegura Marina Adrados Pérez, residente de tercer año de psiquiatría HUSM Lérida, durante el XXIV Congreso Nacional de Psiquiatría

30/10/2021

¿Qué ha sucedido en las urgencias de psiquiatría infanto-juvenil durante la pandemia? Ésta ha sido la pregunta que ha resuelto esta mañana Marina Adrados Pérez, residente de tercer año de psiquiatría HUSM Lérida, ...

¿Qué ha sucedido en las urgencias de psiquiatría infanto-juvenil durante la pandemia? Ésta ha sido la pregunta que ha resuelto esta mañana Marina Adrados Pérez, residente de tercer año de psiquiatría HUSM Lérida, durante el XXIV Congreso Nacional de Psiquiatría.

"La psiquiatría infanto-juvenil ha estado en una situación más vulnerable, más frágil y más miedo que el resto", apunta Adrados. Varios estudios confirman estas declaraciones. Por ejemplo, uno en China habla de que de 8079 pacientes, 43,7% sufren depresión, 37,4% ansiedad y 31,3% ansiedad y depresión. Los factores asociados con estos síntomas depresivos y ansiedad son que son mujeres y que cursan el último año de instituto. Otro es un estudio retrospectivo en urgencias de Texas en el que participan 9092 pacientes. En éste, los resultados son que ha aumentado la ideación suicida en marzo y julio y ha habido intentos suicidas desde febrero hasta abril y julio. "Precisamente estos son los meses en los que se declararon los dos estados de alarma en EE.UU.", matiza la psiquiatra.

Pues bien, en HUSM Lérida han realizado un estudio en el que han participado 342 adolescentes en urgencias de psiquiatría en Lérida. "Desde la pandemia han aumentado las visitas en psiquiatría infanto-juvenil en HUSM Lérida un 5,4%", afirma Adrados.

Los motivos de las consultas son tres: descenso de la alteración de la conducta, aumento de la ideación suicida y por descompensaciones ansiosas.

Según cuenta Adrados, el perfil del paciente es más joven conforme pasa el tiempo de la pandemia. "Ha aumentado el número de pacientes que viven con familiares que acuden y ha aumentado los pacientes sanos, que no tienen antecedentes", declara la psiquiatra.

Asimismo, señala que los diagnósticos son claros. "Al principio hay un descenso del número de trastorno de infancia y un aumento del trastorno de ansiedad y, más adelante, se produce un descenso de los pacientes con Clusber B", afirma Adrados.

Por otra parte, la psiquiatra confirma que hubo más hospitalizaciones en el primer estado de alarma de la pandemia. "Apostamos porque es fundamental hacer estudios longitudinales y acercar la salud mental a infanto-juvenil de forma multidisciplinar (colegio, casa, hospital…) para prevenir todo lo que estamos comentando actualmente", demanda Adrados.

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