La brecha de género en los sectores de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (STEM) persiste desde hace años en todo el mundo. A pesar de que la participación de las mujeres en las carreras de grado superior ha aumentado enormemente, todavía se encuentran insuficientemente representadas en estos campos.

Menos del 30% de los investigadores en todo el mundo son mujeres. Y, según datos de la UNESCO (entre 2014 y 2016), solo alrededor del 30% de todas las estudiantes escogen estudios superiores dentro del campo de las ciencias, la tecnología, la ingeniería y matemáticas.

Además, la matrícula de estudiantes femeninas es particularmente baja en el campo de la tecnología de la información y las comunicaciones (TIC), con un 3%; ciencias naturales, matemáticas y estadísticas, con un 5%; y en ingeniería, manufactura y construcción, con un 8%.

Educar en ciencia desde niñas

Nuria Campillo, investigadora del Centro de Investigaciones Biológicas Margarita Salas (CIB-CSIC), que ha moderado esta charla, también ha indicado que, a partir de los 5 años, las niñas ya creen y muestran que tiene menos capacidad para hacer ciertas actividades.

Las científicas convocadas iniciaron sus carreras de manera vocacional y han comentado que la etapa de formación es muy importante, especialmente topar con unos profesores estupendos "es fundamental para que te guíen y tengas más claro que sepas hacer, o bien que odies totalmente una disciplina", ha puntualizado Almudena Ramiro, jefa del laboratorio de Biología de Linfocitos B en el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC).

Respecto a la brecha de género, Blanca Fuentes, jefa de sección del Servicio de Neurología del Hospital Universitario La Paz, ha expuesto que en el ámbito de la medicina "he visto menos desproporción, pues ahora un 70% de los estudiantes de medicina son mujeres".

Además ha explicado que uno de los factores clave para que más niñas se interesen por las ciencias está en la educación desde bien pequeñas, "hay que poner el foco ahí para que puedan llegar más mujeres a tales disciplinas y así puedan conocer las oportunidades profesionales que existen".

Carmen Gil, investigadora del grupo de Química Médica y Biología Traslacional del Centro de Investigaciones Biológicas Margarita Salas (CIB-CSIC) también ha opinado lo mismo. "Son necesarias más charlas en los colegios para que los jóvenes tengan claro qué quieren hacer cuando les toca decidir". Ello sumado a los estereotipos que ven los niños desde bien pequeños.

Por su parte, Marisol Soengas, jefa del grupo de Investigación en Melanoma en el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), ha dado a conocer que hay muchas mujeres en cuanto al ámbito biomolecular, "pero el problema está en los puestos de liderazgo y en la falta de referentes por parte de las chicas actualmente".

Ha comentado que desde el CNIO han ido a los colegios y a las universidades "y entre otros, hemos notado una falta de seguridad especialmente de las chicas más mayores".

Blanca Fuentes también ha remarcado que este rechazo por determinadas disciplinas relacionadas con la investigación tiene que ver con la inseguridad laboral, "no se invierte en ciencia y esto es importantísimo para seguir adelante".

Apoyo a otras mujeres

Las científicas han hablado sobre el apoyo a otras mujeres. "Necesitamos una parte de apoyo de mentorización porque hay muchas mujeres que se sienten inseguras por falta de apoyo. En CNIO hacemos un esfuerzo para resolver este tema y tenemos mentores que las guían, porque esto anima a muchas mujeres a seguir adelante", ha mencionado Carmen Gil.

Vida personal y laboral

Almudena Ramiro ha comentado que es frustrante cuando muchas mujeres priorizan su vida personal a la laboral y los hombres lo hacen menos. Así, en el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, Blanca Fuentes se ha puesto como ejemplo de que se puede compaginar vida laboral y familiar "he tenido 4 hijos en un corto periodo de tiempo y también hice la tesis doctoral a la vez, así que debemos quitarnos estos estereotipos de encima".

Desigualdad

Marisol Gil no ha visto una gran discriminación en su carrera laboral pero si un trato desigual, "tengo muchas anécdotas como cuando en seminarios o conferencias presentan al doctor tal y a Marisol sin más, debemos acabar con estos sesgos que tenemos todos".

Gemma Triola, jefa del grupo de Biología Química en el Instituto de Química Avanzada de Cataluña (ICAQ-CSIC), también ha visto este sesgo en su trabajo, tanto por parte de hombres como de mujeres.

Respecto a las cuotas y paridad entre mujeres y hombres en trabajos, instituciones o conferencias, las científicas están de acuerdo pero creen que no hace falta, lo importante es reconocer el trabajo diario.