Un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Texas (UTMB) revela que residir en un radio de unos 50 km de una refinería de petróleo incrementa el riesgo de sufrir cáncer de vejiga, mama, colon, pulmón y próstata, así como el de leucemia. La probabilidad de ser diagnosticado de esta última enfermedad fue mayor en las personas que vivían hasta a 16 km de la instalación, en comparación con las que vivían a una distancia de entre 35 y 50 km.

Los respectivos rangos de distancia se asociaron a una probabilidad creciente de enfermedad metastásica o sistémica. Una correlación similar fue hallada con respecto del estadio de los cánceres en el momento del diagnóstico, que resultaron estar más avanzados con la mayor proximidad a la refinería.

El mayor riesgo fue el relativo al cáncer de próstata en residentes dentro de un radio de 16 km.

Stephen Williams, Jefe de Urología en la UTMB y director del estudio, afirma que las refinerías emiten contaminantes peligrosos, tales como benceno, tolueno, etilbenceno y xileno, así como otros hidrocarburos volátiles que pueden tener impacto sobre la salud. Para los residentes en estas áreas el investigador recomienda los chequeos anuales y el cribado para la detección de los distintos tipos de cáncer.