El Palacio de Congresos de la ciudad de Zaragoza alberga el XXXVI Seminario de Ingeniería Hospitalaria - Congreso Nacional, en el que se dan cita la inmensa mayoría de los grandes profesionales del sector con un objetivo común: avanzar hacia el `Hospital 4.0´.

Tal y como ha asegurado el presidente de la Asociación Española de Ingeniería Hospitalaria, Luis Mosquera, "este Congreso es un referente a nivel nacional, y los temas que se tratan son de auténtica actualidad". Mosquera es partidario de "humanizar las infraestructuras hospitalarias. El hospital no puede ser hostil a la sociedad que lo soporte, hay que ir hacia unos edificios más sostenibles, no solo deben ser autónomos medioambientalmente sino que deben contribuir a mejorar y recuperar su entorno".

Por su parte la consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Pilar Ventura, cree necesario "ganar seguridad y precisión en la toma de decisiones sobre los tratamientos. Es fundamental usar la tecnología más avanzada integrando el acceso a la información en un hospital en red para que el paciente tenga acceso y pueda participar en la toma de decisiones sobre su salud".

Ventura considera que es preciso "proponer alternativas para que los edificios sean más eficientes, seguros, sostenibles y respetuosos con el medio ambiente. El principal interés del Congreso está en dar valor a los profesionales, posibilitando la conversión de los hospitales en centros inteligentes, capaces de dar respuesta a los sanitarios y pacientes".

^{Belén Masía}

La tecnología al servicio de los usuarios

Seguidamente ha tomado la palabra Belén Masía, Doctora en Ingeniería Informática, profesora del Departamento de Informática e Ingeniería de Sistemas de la Universidad de Zaragoza y miembro del I3A (Instituto de Investigación en Ingeniería de Aragón). Masía ha realizado un resumen de las aplicaciones informáticas y tecnológicas en el tratamiento de enfermedades y del estrés postraumático, centrándose en elementos como la realidad virtual.

Para Masía uno de los retos que tienen actualmente los investigadores es utilizar la realidad virtual en el tratamiento de los pacientes. "El hardware se ha democratizado, ahora mismo podemos construir incluso un casco de realidad virtual con un teléfono móvil y una carcasa de cartón. Está habiendo grandes avances en la creación de plataformas para compartir contenido 360, como por ejemplo YouTube", ha explicado.

El principal problema de la aplicación de estas nuevas tecnologías es, según la doctora, "entender el comportamiento del usuario en este nuevo medio". Parafraseando a Randy Pausch, "la tecnología en sí misma no impresiona, ni es la que hace que se popularice el medio. Se da por hecho que funcionará bien. Lo importante es el contenido, la experiencia", ha indicado Masía, para quien la tecnología por sí misma no es suficiente, es fundamental la experiencia del usuario. Por ello, considera que la investigación básica es imprescindible ya que "no hay innovación real, disruptiva, sin ella".

A continuación ha explicado un novedoso sistema de reconocimiento de actividad visual que los investigadores están poniendo en práctica con bebés, basado en estímulos directos consistentes, básicamente, en "enfrentar" a los bebés con pantallas en las que únicamente hay un estímulo (normalmente un dibujo), lo que permite comprobar con gran exactitud si la visión del bebé responde efectivamente o no a los estímulos visuales que tiene delante en base a la fijación de la mirada. "La fijación estable es la base de un buen desarrollo visual", ha indicado Masía.

Finalmente, Masía ha cerrado su intervención indicando que este método permite una exploración más precisa, repetible, rápida y automática de la función visual. "La colaboración entre médicos e ingenieros está llena de oportunidades", ha afirmado.