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Seguir un estilo de vida saludable, indispensable tras sufrir un ictus

El objetivo es prevenir un segundo episodio y trabajar por una adecuada recuperación física y mental. Por ejemplo, practicar yoga no solo tiene beneficios para la autoestima y la salud mental de los pacientes, sino que también ayuda a la recuperación del sentido del equilibrio.

27/06/2018

Después de sufrir un ictus, el día a día del paciente puede cambiar mucho. Sin embargo, a partir de ese momento seguir un estilo de vida saludable es más importante que nunca, para prevenir un segundo ictus y trabajar por una adecuada recuperación física y mental. Según la Sociedad Española ...

Después de sufrir un ictus, el día a día del paciente puede cambiar mucho. Sin embargo, a partir de ese momento seguir un estilo de vida saludable es más importante que nunca, para prevenir un segundo ictus y trabajar por una adecuada recuperación física y mental. Según la Sociedad Española de Neurología, el 90% de los casos de ictus se podrían evitar con una adecuada prevención de factores de riesgo como la diabetes, la hipertensión arterial o el tabaquismo.

Además de una alimentación equilibrada, la rehabilitación y el control médico, para disfrutar de una vida sana deben incorporarse buenos hábitos en el día a día. La Dra. Almudena Castro, coordinadora de la Unidad de Rehabilitación Cardíaca del Hospital La Paz (Madrid), expresidenta de la Sección de Cardiología Preventiva y Rehabilitación Cardíaca de la SEC (Sociedad Española de Cardiología) y directora de Mimocardio, explica que "el estrés es un factor desencadenante en personas con factores de riesgo como el tabaquismo, sedentarismo, colesterol u obesidad". Por esta razón, recomienda que "tras un ictus, es importante no caer en el sedentarismo y participar en actividades que ayuden a mejorar las habilidades y destrezas físicas que, a su vez, permitirán al paciente ganar independencia". Y añade que "el proceso de recuperación tras un ictus puede convertirse en una oportunidad para modificar aquellos hábitos perjudiciales para la salud".

Por otra parte, la autoestima y la mentalidad positiva de la persona que ha sufrido un ictus también pueden resentirse. Por esta razón es muy recomendable realizar la recuperación del ictus junto con otras personas afectadas, ya que el trabajo en grupo ayuda a motivarse y facilita la superación del miedo al rechazo, fomentando las relaciones sociales.

3 consejos para un estilo de vida saludable tras sufrir un ictus, por Xuan Lan

Xuan Lan, yogui, bloguera y profesora de la última edición de Operación Triunfo, recomienda el yoga como actividad física y mental después de sufrir un ictus. De hecho, según un estudio publicado en la revista médica Stroke, el yoga puede ayudar a los pacientes que han sufrido un ictus a mejorar su sentido del equilibrio y la confianza en ellos mismos.

La profesora de yoga explica que "durante el proceso de adaptación que viene tras un ictus, es importante acordarnos de cuidar y mimar cuerpo y mente. Ser físicamente activo contribuye al bienestar físico y mental. Pero también debemos intentar mantener una actitud positiva, acabando el día dando las gracias por algo, ya sea significativo o un detalle, ello facilita que nos acordemos de los méritos que vamos consiguiendo día a día y nos aporta satisfacción".

Xuan Lan recomienda:

  • Iniciarse en la meditación diaria: permite desarrollar una capacidad y fuerza mental que nos mantiene tranquilos y nos permite volver a un estado de paz cuando surgen emociones negativas y desagradables como la ira, el agobio, el odio o la tristeza. El método de meditación mindfulness se convierte en un estilo de vida consciente, consiguiendo que nuestra mente sea capaz de estar presente en cada momento. Esta práctica ayuda a madurar emocionalmente, a entender nuestro yo interior y a evolucionar, aceptando las circunstancias de la vida.
  • Empezar la jornada con un propósito para el día: llevar la atención, la energía y el esfuerzo a un aspecto o reto cotidiano que requiera disciplina o motivación. Puede ser un esfuerzo físico o mental: hacer un recado, ir a un lugar, hacer una llamada, intentar algo nuevo, superar un miedo, practicar deporte o ir a caminar, encarar el día con una sonrisa… hacerlo con intencionalidad y consciencia.
  • Organizarse para mantener una vida social: es importante sentirse integrado, aceptado en un grupo y poder compartir una actividad de ocio o de ejercicio físico, como puede ser jugar a cartas, un club de lectura, salidas culturales, aprender un nuevo idioma en grupo, juntarse con otros que han sufrido un ictus para compartir consejos, etc.

Puedes ver el vídeo sobre el Estilo de Vida Saludable en personas que han sufrido un ictus aquí.

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