En su toma de posesión este jueves, 30 de marzo, el nuevo presidente de la CGCOM, y la Organización Médica Colegial (OMC), doctor Serafín Romero, declaró su compromiso institucional y social con el SNS, los profesionales y los pacientes. Como principal problema del sistema sanitario destacó asegurar su sostenibilidad económica. Para encauzarla bien, aprovechó la presencia de la presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor, para pedir a los diputados un comisión de expertos destinada a proponer las medidas necesarias para conseguir asentar dicha sostenibilidad. En la misma línea, pidió un pacto contra la precariedad de los profesionales, tanto en el ámbito público como en el privado. Abogó, además por establecer políticas de igualdad dentro de la profesión médica. No se olvidó tampoco de la necesaria regulación pendiente de los conflictos de intereses. Así como mostró su buena disposición a trazar alianzas con asociaciones de pacientes y compartir espacios comunes con su “profesión hermana”, la Enfermería. Finalmente, y volviendo al marco laboral, el doctor Romero consideró una emergencia abordar las tasas de reposición en el sector sanitario.

Pie de foto:  Equipo responsable del informe "AP25"

En la mañana de hoy, posterior a la toma de posesión del doctor Romero, la OMC pidió una financiación suficiente y equitativa para hacer frente a los retos que representa la Atención Primaria en el SNS. Como principal tesis del libro “AP25”, que prefigura cómo será este escalón de la asistencia sanitaria en 2025, se insta a los poderes públicos para que ocupe en ese año el 17,3% del presupuesto sanitario. Llegar a ese porcentaje, precisaría un incremento del 0,1% sobre el PIB en el presupuesto sanitario público entre los años 2017 y 2025 y dentro de éste un avance del 0,3% anual en la participación, de forma que ese 17,3% equivaldría en el año 2025 al 1,19% del PIP. Tal como explicó el vocal nacional de AP Urbana, doctor Vicente Matas Aguilera, dicha partida presupuestaria podría asumir la creación de 2.200 plazas más para médicos de familia, para una correcta adecuación a los cupos de pacientes y una reducción eficaz de las demoras. Con ese incremento de las plantillas, los cupos máximos de pacientes no superarían los 1.450 ciudadanos asignados, objetivo alcanzable mediante una inversión anual de 100 millones de euros.

El documento “AP25” propone, en resumen, la búsqueda de otro modelo diferente e innovador que potencie las capacidades de microgestión de los médicos. Se insta a acciones para reducir el impacto de la medicalización que afecta a la sociedad actual.

Pie de foto:  Gabriel del Pozo Sosa (CESM)

En el plano retributivo, el vicesecretario general de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), el doctor Gabriel del Pozo Sosa, fue el encargado de proponer un esquema retributivo digno para los médicos. No obstante, antes se preguntó por qué los médicos, que tienen la misma categoría funcionarial que los fiscales y los jueces cobran 500 euros menos que ellos en el sueldo base mensual. Dicho esto, Del Pozo Sosa pidió para los médicos un salario base de 1.500 euros, con 50 euros adicionales por trienio trabajado. Plus de productividad de 500-1.000 euros y derecho voluntario a 300-600 horas extra al año con fiscalidad preferente por contribuir a la sostenibilidad del SNS. De forma que la exclusividad suponga el 20% de la nómica y se descongele el complemento de carrera profesional.

En lo tocante a la feminización de la profesión médica, con un 73% de las plazas de medicina de famila en 2015, la vocal de AP Rural del Colegio Oficial deMédicos de Tarragona, la doctora Mercedes Rico Urios, denunció que el área donde están más presentes las doctoras ha habido en los últimos tiempos un recorte presupuestario del 14,7%, equivalente a 1.500 millones de euros. Por ello, y para evitar la penuriarización de la profesión médica pidió mejores condiciones profesionales, estabilidad plantillas, flexibilidad de horarios y posibilidades reales de conciliación laboral. Todo ello para evitar problemas como la falta de acceso a especialidades quirúrgicas como, por ejemplo, neurocirugía, por parte de las médicas.

Pie de foto:  Dres. Mercedes Rico Urios, Juan Manuel Garrote y Vicente Matas Aguilera

El libro de AP también considera preciso un cambio del Sistema Nacional de Salud, en tránsito a un modelo que garantice el abordaje de la cronicidad, la correcta aplicación en la práctica clínica y en la gestión clínica de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC), la inclusión de la asignatura de Medicina Familiar y Comunitaria como obligatoria en todas la Facultades de Medicina, el Desarrollo Profesional Continuo y la Validación Periódica de la Colegiación como elemento primordial de garantía y seguridad en la atención a los pacientes,  y servicios de apoyo al investigador. Todos estos aspectos forman parte también de las propuestas y reflexiones que contiene el documento.

Finalmente, se pide desde el informe que la historia clínica electrónica sea única para Atención Primaria y Hospitalaria, común a todas las CCAA y gestionada por el paciente y su médico de familia, con acceso universal, previo consentimiento explícito del paciente.

Durante el encuentro, inicialmente moderado por el secretario general del CGCOM, doctor Juan Manuel Garrote, repasó la labor asistencial desarrollada por la Fundación para la Protección Social de la OMC, que hasta la fecha ha asistido económicamente a miles de viudas, viudos y huérfanos de médicos y médicas.