Según expresó recientemente el presidente de Takeda para Canadá y Europa, Marc Princen, la irrupción tecnológica está arrinconando los tradicionales modelos asistenciales, haciendo posible optar a mejores perspectivas de gestión y mayores espacios de crecimiento empresarial. Según el presidente, en las sociedades avanzadas basadas en la confianza no puede haber otra ubicación para los pacientes que ser el centro de la asistencia. Desde esta premisa, Princen estimó que el crecimiento de la actividad industrial farmacéutica viene dado por añadidura, siendo su desarrollo natural. Con este motor de innovación, es posible llegar a nuevos diagnósticos, biomarcadores y servicios. Esta concepción holística, precisó el directivo, permite crear un “ecosistema” entorno al paciente, en el que están incluidos los médicos, sus líderes más destacados, y, sin duda, también las enfermeras y las propias familias de los pacientes. Como segunda gran variable a controlar, Princen destacó las propias compañías farmacéuticas. Siendo este terreno, el adecuado para focalizar todas las actividades de los profesionales movilizados en el sector, es decir, los médicos y las enfermeras, pero también los equipos comerciales y organizativos. Se trata de adoptar una misma filosofía holística centrada en los pacientes. Una forma de compartir un mismo compromiso que pueda hacer avanzar la innovación puesta al servicio de las necesidades de salud de los ciudadanos. Siguiendo este enfoque general, Princen aseguró estar preocupado ante la necesidad de lograr que las terapias innovadoras serán realmente accesibles a todos los ciudadanos que las necesitan. Esta inquietud, confesó el directivo farmacéutico europeo, se puede traducir siempre en un preguntarse “qué podemos hacer para que las personas prosperen y vivan mejor”. Constituyendo un objetivo muy ambicioso a perseguir, pero factible.

A la hora de hablar de la nueva ola tecnológica en la que estamos inmersos, Princen distinguió los conceptos de mero “cambio”, y de “transformación”, como fenómeno este último que surge globalmente y se proyecta en todas las dirección de las empresas. Prueba de ello es, según el presidente europeo de Takeda, la tecnología y el gran volumen de información que se genera, obligando a las organizaciones a hacer las cosas de forma radicalmente distinta a como se hacían por costumbre. Para ello, Takeda está diseñando sus propias plataformas tecnológicas que puedan servir de soporte a todos estos vectores de crecimiento. Reconoció por otro lado Princen, que en materia digital, su propia compañía ha tenido aciertos y errores. Esto forma parte de un aprendizaje corporativo imprescindible para el crecimiento de las organizaciones, del que, según el directivo, nadie se puede considerar al margen.

Como tercer bloque de análisis, el presidente de Takeda para Europa razonó que la Innovación en el seno de la Industria farmacéutica debe ser una capacidad generadora de reputación para las compañías farmacéuticas.

Princen será uno de los ponentes estrella que Eyeforpharma reunirá en Barcelona durante su cita internacional de 2017, a la que también acudirán el CEO de Sandoz, Richard Francis, el CEO de Nestle Health Science, Greg Behar, y el nuevo presidente de Eli Lilly, David Risks. En su quinta edición eyeforpharma Barcelona Summit cuestionará los modelos comerciales existentes e interrogará a los asistentes sobre las nuevas posibilidades de colaboración y estrategias dentro de una nueva forma de ver el mundo de la salud. Durante la cita, se tratará con expertos sobre innovación comercial, los equipos comerciales del futuro, el compromiso de excelencia hacia los pacientes y consumidores, la transformación digital y las alianzas estratégicas entre laboratorios y proveedores.

PIE DE FOTO:  Marc Princen, presidente de Takeda para Europa y Canadá