Este jueves, 21 de abril, la Medical Manager de Lundbeck España, Susana Gómez-Lus, tuvo el gusto de presentar Brintellix (Vortioxetina) tras un desarrollo farmacéutico de 15 años. Como indicación del nuevo medicamento, la doctora nombró la Depresión Mayor. Se trata del trastorno mental más frecuente en España. Una patología compleja y muy incapacitante que afecta a múltiples dimensiones de la existencia humana, principalmente, por el amplio abanico de síntomas que comporta. Como cifras que expresan la gravedad de la patología, Gómez-Lus citó que entre el 30 y el 50% de los pacientes con depresión no están diagnosticados, mientras que este dato coexiste con multitud de casos de “falsas” depresiones por el desenfoque social que existe actualmente respecto a esta enfermedad. A ello añadió la responsable médico de Lundbeck que más del 70% de los pacientes responden aceptablemente a los tratamientos, pero no logran mejoría en los denominados síntomas residuales: problemas cognitivos, frialdad emocional incapacitante para experimentar procesos de duelo y disfuncionalidad sexual. Una problemática asistencial que se ve agravada por el hecho de que hasta el 44% de los pacientes tratados con antidepresivos abandonan su tratamiento, a los 3 meses de iniciarlo, por causa de los efectos adversos sobrevenidos. Una circunstancia que explicaría, junto a otros factores, que la mitad de los pacientes adultos y la mayoría de niños con depresión estén insuficientemente tratados en España.

Según la doctora Gómez-Lus, Vortioxetina es el primer fármaco de una nueva generación de antidepresivos, con un innovador mecanismo de acción multimodal que permite hablar del medicamento como el mayor avance farmacológico experimentado en el tratamiento de la Depresión a lo largo de los últimos 10 años. Una buena opción para el paciente con depresión cuyo rasgo principal de su patología no es la tristeza a diferencia de lo que opina el común de los ciudadanos (las personas con esta enfermedad no lloran casi nunca), a un precio final sumamente aceptable de 3 euros por paciente y mes para el propio interesado.

Acompañó a la responsable médico de Lundbeck el doctor Enric Álvarez, director del Servicio de Psiquiatría del Hospitalde la Santa Creu i Sant Pau y profesor titular de Psiquiatría en la Universidad Autónoma de Barcelona (CiberSam, IBsantpau). Durante su parlamento, quedó claro que el nuevo fármaco es un antidepresivo multimodal con acreditada eficacia antidepresiva y un excelente perfil de tolerabilidad. Encontrándose entre sus puntos fuertes la remisión total, o reducción cuando menos, de los síntomas cognitivos que aparecen con la enfermedad (cierta “abulia intelectiva”, dificultad para el procesamiento mental y la toma de decisiones). Así mismo, Brintellix ofrece buenas cifras en evitación de las recaídas, produciendo una mejoría global del Trastorno Depresivo Mayor (TDM), según la escala de Depresión de Montgomery-Asberg (MADRS). En opinión del doctor Álvarez, el nuevo fármaco logra para el paciente una clara mejoría de la función cognitiva y un mejor mantenimiento del impulso sexual.

Cerró la terna médica de la presentación el doctor Miquel Roca, presidente de la Fundación Española de Psiquiatría y Salud Mental, coordinador de la Unidad de Psiquiatría del Hospital Juan March de Mallorca y profesor titular de Psiquiatría en la Universidad de las Islas Baleares. Quien aseguró que el nuevo medicamento se ha demostrado muy útil para que el paciente con Depresión recupere su memoria, su concentración, su capacidad de atención y su rapidez de respuesta a las situaciones cotidianas de la vida. Representando una nueva opción para los pacientes que han mostrado una respuesta insuficiente o inadecuada a los inhibidores selectivos de recaptación de la serotonina (ISRS) y los inhibidores de la recaptación de serotonina y noradrenalina (IRSN). En definitiva, Vortioxetina llega a España para que el paciente depresivo recupere la funcionalidad de su vida.

Finalmente, y en Pediatría, el doctor Álvarez aportó el dato “escalofriante” de que únicamente el 5% de los niños que ponen fin a su vida están en tratamiento antidepresivo, como ejemplo y escarnio de lo mucho que tiene que mejorar todavía la Psiquiatría pediátrica en este país.

PIE DE FOTO:    Los doctores Miquel Roca, presidente de la Fundación Española de Psiquiatría y Salud Mental, Susana Gómez-Lus, directora médica de Lundbeck España; y Enric Álvarez, director del Servicio de Psiquiatría del Hospitalde la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona