Las tecnologías de la comunicación son un vector que impulsa la nueva economía digital. Inmersos en un proceso de datificación de la sociedad donde las tecnologías se nutren cada vez más de datos, la Autoridad Catalana de Protección de Datos (APDCAT) ha celebrado la jornada La implantación de la privacidad en el diseño de aplicaciones tecnológicas con el objetivo, “no sólo de velar por la protección de la privacidad, sino para promoverla como un valor diferencial, tanto para organizaciones públicas como privadas, y un aliado de los nuevos modelos de negocio basados en los datos que mejoran los derechos de las personas”.

Estas son algunas de las conclusiones que se han podido escuchar a lo largo de la jornada, en la que han participado expertos en soluciones de gestión y desarrollo de aplicaciones dirigidas tanto a la Administración como a instituciones sanitarias. El acto, inaugurado por la Directora de la APDCAT, M. Àngels Barbarà, se ha centrado, a través de un debate distribuido en dos sesiones, en dar respuesta a los retos de innovar en el tratamiento de la información personal de la manera más respetuosa posible con la privacidad de los usuarios.

En la era del mercado del Big Data se generan 1,7 millones de bytes al minuto. Se trata de un mercado que crece cada  año en torno a un 40%, y que incumbe tanto a gestores públicos como privados, y por extensión, al conjunto de los ciudadanos y al tratamiento de sus datos.

La primera sesión se ha centrado en afrontar los desafíos tecnológicos para garantizar esta privacidad y ha contado con Jaume González, asesor tecnológico de Emercom Tech (una empresa tecnológica catalana galardonada con el Premio Protección de Datos en el Diseño 2015 por su plataforma de gestión de emergencias); Joan Font, director gerente de Audifilm (entidad galardonada con el primer accésit del Premio Protección de Datos en el Diseño 2015); y Josep Puy, miembro y portavoz del grupo de Trabajo de Seguridad de la Información de la Asociación Catalana de Ingenieros de Telecomunicación.   

El 80% de los problemas de seguridad son de naturaleza humana. Por ello, cuando se diseñan soluciones de gestión se debe realizar un análisis de riesgos de la aplicación, ya que tiene un impacto en el ahorro de tiempo, monetario, de prestigio y de satisfacción del usuario. En cuanto a la protección de datos, no sólo supone analizar los procedimientos, sino también cuestiones como las personas y el marco legal, tal y como se ha explicado en la primera sesión.

Se calcula que la inversión en eSalud o salud electrónica representa a día de hoy cerca del 1,5% del gasto sanitario total en Europa. Una inversión baja pero que comporta un incremento significativo de productividad y ahorro en un ámbito que cuenta con un elevado número de transacciones, redes y bases de datos. En este contexto, el desarrollo actual de las TIC permite que optimizar la gestión de los sistemas sanitarios, cada vez más centrados en la autonomía del paciente que comporta que éste pueda decidir cómo es tratada su información. 

Durante la segunda sesión han participado Enric Llopis, Project Manager de la Fundación TIC Salud, Òscar Mula, jefe de la Unidad de Telecomunicaciones del Hospital Universitari Vall d’Hebrón y Raimon Dalmau, director del área de organización y sistemas de información del Sistema de Emergencias Médicas (Entidad galardonada con el segundo Accésit  del Premio Protección de Datos en el Diseño 2015).