La jornada "Violencia de Género y Salud" fue organizada el pasado 24 de junio por la Fundación para la Formación de la OMC (FFOMC), que preside el doctor Juan Martínez Hernández. El mismo destacó las graves secuelas psíquicas y corporales que tiene el maltrato contra las mujeres, en sus múltiples variantes, de forma que son muchas las especialidades médicas que pueden detectar estos casos, además de los facultativos de Atención Primaria. Martínez. Hernández aseguró igualmente que queda mucho camino todavía por recorrer para que todos los profesionales sanitarios combatan esta lacra social dentro de todo el potencial que para ello les confiere el trato y la confianza con las pacientes. Así mismo, se refirió al caso de la India, donde los fenómenos de agresiones a las mujeres son cada vez más brutales, según se van conociendo por parte de los medios de comunicación locales e internacionales. A todo ello añadió el presidente de la OMC, doctor Juan José Rodríguez Sendín, que la violencia machista surge de la universalización de lo masculino como principio de exclusión del valor de lo femenino, que es anulado por la instauración de una convivencia en términos de absoluta desigualdad.

La doctora Leonor García de Vinuesa, miembro de la Red Andaluza Formma para la formación sobre violencia de género para los profesionales sanitarios, aseguró que las implicaciones médicas de la violencia contra las mujeres van mucho más allá de los hematomas y las contusiones. Ya sea puntual o cronificada, sus secuelas psicológicas y físicas pueden ser incluso irreversibles. Las lesiones características del maltrato se unen así a la Depresión, los problemas digestivos, el insomnio, los desarreglos hormonales, la caída de la autoestima, los conatos de suicidios, las heridas disumuladas o mal cicatrizadas, etc. suponen muchas veces un desafío para los clínicos ya que reiteradamente enmascaran la verdadera causa que las víctimas no se atreven a denunciar por desconocimiento, vergüenza o miedo. De esta forma, las agresiones no sólo son detectables y potencialmente denunciables por los médicos forenses y los facultativos de Atención a Primaria. Igualmente pueden reconocidas y tratadas en Oftamología, Aparato Digestivo, Psquiatría, Ginecología, Endocrinología, Traumatología, Otorrinonaringología y muchas más. Destacó especialmente la ponente las agresiones relacionadas con el aparato reproductor de la mujer y sus mamas, siendo zonas especialmente castigadas por los maltratadores que, como norma, se muestran especialmente crueles contra todas las especifidades femeninas.

En cuanto a los cuadros psquiátricos que muestran las mujeres maltratadas siempre pasan por las fases de desconocimiento, desorientación y rebeldía contra la situación que padecen. En todas ellas, se produce un progresivo aislamiento provocado por el maltratador, aumentando los síntomas depresivos en las víctimas que en ocasiones tienen resultados fatales. El experto de la Organización Mundial de la Salud en violencia de género y profesor de Medicina Legal Miguel Lorente Acosta explicó que la OMS ya determinó que la violencia de género es un grave problema de Salud Pública, mediante la resolución 49.25 realizada en Melbourne (Australia). Un idea ya establecida por Walters y Parke en 1964, al nacer toda esta violencia de una serie de valores culturales profundamente equivocados, aunque socialmente aceptados. En definitiva, Lorente Acosta llegó a aseverar que la Salud de las sociedades está profundamente enferma de machismo. También destacó el ponente la importancia de una buena cumplimentación del parte de lesiones, ya que suele ser la base de las actuaciones judiciales. Un terreno, el jurídico, que fue completado por el magistrado del Juzgado de lo Penal número 1 de Ponferrada (León), Óscar Hernaiz Gómez, quien explicó el estado legal de la cuestión desde un municipio especialmente castigado por la violencia ejercida contra mujeres. Finalmente, y como resumen de la jornada, la doctora Mónica Terán, coordinadora de la misma y vocal de Formación en la OMC, pidió que se dote a los médicos de herramientas funcionales para detectar y poder denunciar la violencia de género, ya que estos profesionales sanitarios, junto a Enfermería, son los que pueden actuar antes de que se realicen las denuncias o las agresiones lleguen a los juzgados.

PIE DE FOTO: El doctor Juan José Rodríguez Sendín, presidente de la Organización Médica Colegial (OMC)