Publicidad
Publicidad

La AEEH aboga por una Estrategia Nacional en Hepatología

El ‘Libro Blanco de la Hepatología en España’ demuestra que es necesario que las autoridades sanitarias desarrollen una Estrategia Nacional en Hepatología en nuestro país.

13/02/2015

Acerca del fututo, seis reflexiones fueron lanzadas por los miembros de la Junta Directiva de la Asociación Española para el Estudio del Hígado (AEEH) en la presentación, ayer, del Libro Blanco de la Hepatología en España. La primera fue que hay que dotar de los recursos humanos, materiales y económicos ...

Acerca del fututo, seis reflexiones fueron lanzadas por los miembros de la Junta Directiva de la Asociación Española para el Estudio del Hígado (AEEH) en la presentación, ayer, del Libro Blanco de la Hepatología en España. La primera fue que hay que dotar de los recursos humanos, materiales y económicos necesarios en los Servicios hospitalarios, que garanticen una adecuada atención a los pacientes hepáticos y el menor impacto asistencial de las enfermedades en el futuro. El segundo objetivo que se transmitió fue que hay que adaptar el modelo asistencial actual de manejo de las enfermedades hepáticas a las necesidades regionales, potenciando las consultas especializadas en Hepatología. En tercer lugar, hay que reorientar las estrategias actuales en el ámbito de la Salud Pública, con el objetivo de favorecer el diagnóstico y el tratamiento precoz de las enfermedades hepáticas. En cuarto lugar, se señaló la necesidad de establecer un sistema de información epidemiológica de las enfermedades hepáticas que apoye la toma de decisiones a nivel regional. La quinta reflexión fue que hay que potenciar la formación y la actualización científica de los médicos responsables del manejo de estas enfermedades hepáticas. Por último, subrayaron que hay que favorecer la investigación realizada por los médicos responsables del manejo de pacientes hepáticos, que “actualmente es de altísima calidad científica”.

La presentación del libro fue acompañada de una mesa redonda centrada en el Plan Integral de Hepatitis C. Mario Mingo, presidente de la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados y diputado del PP, y José Martínez Olmos, portavoz de Sanidad del PSOE en el Congreso, ofrecieron la perspectiva política, con más puntos coincidentes que contrarios, a pesar de pertenecer a dos partidos distintos. Mingo recordó que en 2001-2002 se discutieron en la Cámara Baja las ayudas a los enfermos. “En los dos últimos años, hemos cambiado las posibilidades de los enfermos. Hay esperanza. Nos debemos centrar en lo que es esencial: colaborar de la mano de los expertos en eso que hemos llamado un Plan Estratégico Nacional para el Abordaje de la Hepatitis C. Vamos a saber cuál es la epidemiología de la enfermedad, cuál es el registro de los enfermos que tenemos y cuáles son las indicaciones terapéuticas”, declaró. Consideró que se necesita a la industria farmacéutica y nuevos fármacos, por lo que rechazó la expropiación de patentes. Tampoco se mostró partidario de financiar específicamente el tratamiento de una enfermedad, como la Hepatitis C. A renglón seguido, sostuvo que hay en este asunto dos criterios: “No habrá ningún enfermo que deje de ser tratado por criterios económicos y los criterios para aplicar las medicinas serán siempre facultativos”.

Por su parte, Martínez Olmos expresó que “tenemos una gran oportunidad en relación con la Hepatitis C”. A su juicio, hay que verlo desde la perspectiva de hacer las cosas bien. “Partimos de la base de que tenemos la posibilidad de afrontar una enfermedad muy grave al disponer de nuevas terapias. En esas circunstancias, ya que hay una prevalencia alta, necesitamos asegurar la equidad en el acceso, que es un valor fundamental. Ése es el reto de la Sanidad Pública. Aquí hay un desafío asistencial importante. El desafío también es económico, porque el coste es mayor que en el pasado. Por eso, nos tenemos que exigir mucho a la hora de definir quiénes son los que tienen que ser tratados. Hay que plantear a las compañías farmacéuticas que el coste tiene que estar bien documentado, porque es la primera vez que nos encontramos con un coste económico tan alto”, pronunció.

También tomaron la palabra Boi Ruiz, consejero de Sanidad de Cataluña, y Manuel Molina, viceconsejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid. Molina, en el tema de la Hepatitis C, negó la mayor cuando se habla de recortes. “Para nosotros, nunca se ha tratado ni ha tenido una traba económica. Hablamos de eficiencia y de sostenibilidad. Nuestro compromiso es dar la mejor atención a la población y negociar con la industria. Tenemos que considerar que el modelo aplicado hasta hoy es útil. Hay que garantizar la igualdad de acceso”, apuntó. Ruiz confesó que “no nos puede pasar lo que nos está pasando, que una cosa que deberíamos vivir con alegría, como puede ser acabar con la Hepatitis C, no se convierta en un problema”, pidió. “Por primera vez, tenemos una posibilidad”, se congratuló. De acuerdo con sus palabras, esto supone un cambio de paradigma de las políticas sanitarias. Las del siglo XXI, sin dejar de centrarse en la enfermedad, tienen que centrase en el abordaje precoz y en la prevención. “Con la aparición de la medicación cuasicurativa de la Hepatitis C, tenemos que ser el país que mejor aborde la enfermedad en las etapas tempranas. Pasamos sólo de concentrarnos en la esfera clínica a también ir a la esfera epidemiológica. Estamos hablando de un problema de salud pública global. No lo podemos abordar sólo desde las CC AA o desde el Estado español, sino desde Europa”, terminó.

Publicidad
Publicidad
Nuestros Podcasts