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Los riesgos cardiovasculares del ibuprofeno a dosis altas serán revisados por las autoridades sanitarias europeas

La evaluación se centrará en el consumo de altas dosis durante largos periodos, como el que pueden usar pacientes con patologías inflamatorias o dolor crónico.

17/06/2014

El Comité de Evaluación del Riesgo en Farmacovigilancia de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA o PRAC, por sus siglas en inglés) acaba de iniciar una evaluación para identificar los riesgos cardiovasculares del consumo a altas dosis del ibuprofeno. La EMA, a través de su Comité de Farmacología, evaluará el ...

El Comité de Evaluación del Riesgo en Farmacovigilancia de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA o PRAC, por sus siglas en inglés) acaba de iniciar una evaluación para identificar los riesgos cardiovasculares del consumo a altas dosis del ibuprofeno. La EMA, a través de su Comité de Farmacología, evaluará el riesgo de tomar 2.400 mg de ibuprofeno al día por periodos prolongados, si bien se revisará únicamente el consumido vía oral, no los fármacos tópicos, como cremas o geles.

Tal y como ha recordado la EMA, el ibuprofeno es uno de los medicamentos más utilizados contra el dolor y la inflamación y tiene un perfil de seguridad conocido, sobre todo a las dosis habituales, que suelen ser bajas y por períodos cortos de tiempo. “Por tanto no existe indicación de riesgo cardiovascular en el uso habitual que hace la mayoría de los pacientes”. “2.400 mg del medicamento no es la dosis que habitualmente toma la mayoría de la población, que se sitúa en torno a los 200 a 400 mg tres o cuatro veces al día”, ha reiterado la agencia.

La revisión se centrará en el consumo de altas dosis durante largos periodos, como el que pueden usar pacientes con patologías inflamatorias o dolor crónico. La seguridad cardiovascular de los antiinflamatorios no esteroideos (ibuprofeno) se evalúa desde hace años. Ya en 2013, hubo un estudio publicado en la revista “The Lancet” que sugería que los riesgos cardiovasculares de las altas dosis de ibuprofeno o medicamentos similares como el diclofenaco podían ser similares a los llamados inhibidores de la Cox 2.