Con motivo de un taller formativo con periodistas y personas con trastorno mental, la Confederación Salud Mental España recordó este miércoles las grandes cifras de este área asistencial en España. Según las mismas el coste de los trastornos mentales suponen ya el 8% del Producto Interior Bruto (PIB) del país, constituyéndose en la segunda causa más frecuente de discapacidad, con un 19,6% del total. Se trata de un grave problema de alcance nacional para Nel González Zapico, presidente de Salud Mental España. Dicha problemática viene dada porque, actualmente, más de un millón de personas convive con algún tipo de trastorno mental grave, sumando un porcentaje que oscila entre el 2,5 y el 3% de la población adulta existente en España. Grupo poblacional de crecimiento imprevisible, según González Zapico, si se tiene en cuenta que, en el transcurso de su vida, el 25% de la población española sufrirá algún tipo de patología mental.

Dado que aún no existe un plan efectivo a nivel estatal para el abordaje de la Salud Mental en el país, el presidente de la confederación informó que el colectivo asociativo redoblará su interlocución ante el Parlamento, en sus respectivas comisiones de Senado y Congreso. Tales esfuerzos irán dirigidos a que los grupos parlamentarios, el Gobierno central y los órganos autonómicos decisores incluyan la Salud Mental en sus respectivas agendas políticas para 2017 y años sucesivos. Entre otras medidas, la confederación insistirá en que se incluya dicha Salud Mental como punto del orden del día del próximo pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS). Por ello, y como primera medida, de cara al nuevo año, González Zapico informó a esta cabecera que ya se ha cursado una petición oficial de entrevista a la nueva ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad (MSSSI), Dolors Montserrat, en la esperanza de que el encuentro institucional pueda producirse todavía dentro de 2016 ó, como tarde, durante el próximo mes de enero.

Junto a las iniciativas de índole política arriba descritas, el presidente de la confederación apuntó otras relativas a la organización sanitaria. En ese terreno pidió que la Salud Mental entre en plano de igualdad dentro de la cartera básica de prestaciones del SNS, y no como un capítulo específico que pueda ser ninguneado. Para hacer más efectiva esa reorganización González Zapico pidió un replanteamiento de la Atención Primaria. Para ese primer escalón asistencial pidió dio 2 cambios importantes. Por un lado, solicitó que se potencie la formación de los médicos de AP en cuestiones de Salud Mental, fundamentalmente para evitar que haya demoras en las derivaciones y diagnósticos, ahorrando la sensación de frustración y desorientación a muchos miles de pacientes. Por otro lado, González Zapico pidió que se doté de más medios humanos y técnicos a los actuales servicios de AP, aumentando el número de psiquiatras, asignando dos psicólogos por cada psiquiatra y 2 enfermeros por cada psicólogo, junto a un equipo completo y multidisciplinar de profesionales sanitarios, en el que los educadores y trabajadores sociales tengan un importante peso específico, dentro del esquema socio-sanitario al que debe tender el sistema sanitario.

El encuentro contó con los testimonios de una veintena de pacientes con patologías mentales tan importantes como el trastorno bipolar o la esquizofrenia y que, sin embargo aportaron con toda sinceridad y espíritu positivo sus experiencias vitales de superación. De esta forma, Basilio, Ana, Víctor, Isabel o Felipe, entre otros, narraron sus ilusiones, barreras encontradas y metas conseguidas a la hora de formar una familia, trabajar o completar sus estudios, a pesar de sus respectivos trastornos mentales. Un ejemplo innegable de superación, si se tiene en cuenta que la mayoría de ellos tienen actualmente una edad situada entre los 40 y 50 años de edad, y sus problemas de salud fueron diagnosticados en la adolescencia y primera juventud. Todos ellos, sin embargo, consideraron que todavía hay muchas murallas que echar abajo como, por ejemplo, la cuestión laboral. Y es que, como explicaron al unísono, subsiste una clara discriminación contractual. Razón por la que el colectivo reivindica un acceso del 2% al cupo de 8% que se reserva a discapacidad en las plazas de empleo público. De igual forma, reclamaron que se adapte un número suficiente de puestos de trabajo a las personas con trastorno mental, mediante formación para el empleo, centros especiales de empleo y las diferentes opciones de apoyo al empleo que existen.

Para hacer más ameno el acto, González Zapico recurrió al sistema de encuesta mediante tarjetas distribuidas entre los asistentes. A partir de sus preguntas y respuestas, se reforzaron mensajes como que el Trastorno Obsesivo Convulsivo (TOC) no siempre implica tics nerviosos, que los pacientes con patología mental tienen los mismos derechos que el resto de los ciudadanos o que el Trastorno Bipolar no es un trastorno del ánimo. Todo ello de cara a que se puedan eliminar infundios, falsos mitos, falsedades y lugares comunes equivocados que, desgraciadamente, alimentan el estigma que todavía acompaña a la patología mental.

Pie de Foto:  De pie en el centro, Víctor poeta, novelista y persona con trastorno bipolar, y el presidente de la confederación Salud Mental España, Nel González Zapico (De pie Izda)